Fuente: LIC. JOSÉ ROBERTO GARZA GARCÍA, Protección de Marcas y Patentes, [email protected], www.promapmx.com, Monterrey, Nuevo León, México
“La exclusividad nace con el registro”
El proceso para definir cuál será el nombre e imagen de un negocio dependen de gustos personales, análisis de mercado y del sector al que se dirigirán los productos o servicios, sus experiencias y vivencias así como las características que engloba el integrar un concepto en un mercado activo y globalizado.
Sin embargo el poder generar la titularidad sobre una marca no depende solamente de gustos personales o visualización del concepto, ni de su uso comercial, implica la participación del INSTITUTO MEXICANO DE LA PROPIEDAD INDUSTRIAL, quien calificará que la marca no sea contraria a las disposiciones de los artículos 4 y 90 así como la ejecución de los elementos necesarios para cumplir con la función marcaria indicados en los numerales 88 y 89 de la Ley de la Propiedad Industrial, es decir que la marca además de ser del agrado personal de su creador y de contar con herramientas para llamar la atención en el comercio debe de ser única, distintiva e individualizadora.
Ante esto tenemos podemos identificar los siguientes elementos para integrar y generar exclusividad en una marca:
- Gustos, vivencias, experiencias y proyección para desarrollar un signo distintivo (ELEMENTO PERSONAL).
- Criterio de la Autoridad en donde se genere un registro siempre y cuando el signo sea suficientemente distintivo, no sea contrario a la moral o buenas costumbres y que no sea idéntico o semejante en grado de confusión con antecedentes registrales vigentes y aplicados a los mismos productos o servicios (ELEMENTO FORMAL).
Así que ya que se tienen que satisfacer tanto los elementos personales como formales para generar un concepto por medio de una marca y generar titularidad reconocida por IMPI, es necesario adentrarnos en los ELEMENTOS COMERCIALES VINCULANTES, que en nuestra actualidad tienen que ver con la explotación comercial de la marca, la globalización y los canales de comercialización tanto físico como virtuales, por lo que genera relevancia el verificar que la misma marca no este registrada en otro rubro, verificar la viabilidad para adquirir el dominio que concuerde con la marca, el desarrollar elementos intelectuales susceptibles de registro, entre otros supuestos, esto para generar un cúmulo de derechos relacionados directamente con el uso comercial de la marca y justificar su valor. Como ejemplo indicamos el siguiente supuesto:
- MARCA REGISTRADA ANTE IMPI
- ADQUISICIÓN DE DOMINIO VINCULANTE CON EL REGISTRO DE LA MARCA
- REGISTRO DE AVISO COMERCIAL PARA PUBLICITAR SIGNO DISTINTIVO
- REGISTROS DE DERECHOS DE AUTOR CONSISTENTES EN IMÁGENES, FOTOGRAFÍAS, INTEGRACIÓN DE INFORMACIÓN.
- INVERSIÓN EN PUBLICIDAD UTILIZANDO LOS SIGNOS TAL CUAL Y COMO SE ENCUENTRAN REGISTRADOS.
Resulta evidente que en el momento de generar un sistema de negocio, el cual cuente con una marca registrada, página web idéntica a la marca, registros autorales, política de confidencialidad, inversión en publicidad más la justificación de gastos para la prestación del servicio o del desarrollo del producto hace que sea susceptible de valuación y asignar un valor real a la marca. Imagine que usted ha consolidado su negocio y desea ampliar su campo de acción por medio de una franquicia o licencia de uso, el contar no solo con los registros de activos intelectuales que sean susceptibles de protección sino además con dominio, nombres en redes sociales, en conjunto con un correcto uso comercial y una política de confidencialidad justifican un costo/precio real sobre el concepto además de ser posible implementar una estrategia fiscal por el uso y difusión de activos intelectuales.
Nuestra recomendación jurídica y comercial es que desde un principio se contemplen los gastos de protección-inversión no solamente del registro de marca, sino además adquirir titularidad en medios de difusión virtuales, identificando los derechos autorales y la información confidencial que implica la vida comercial de la marca. Es cierto que esto representa gastos pero lo más importante es que se generan herramientas comerciales e instrumentos jurídicos para potencializar el negocio, que al justificar su titularidad además de incrementar su valor pueden ser objeto de especulación comercial en cualquier momento.
El registrar la marca es solo el primer paso, pero igual de importante resulta el identificar que activos son susceptibles de generar un derecho para que se vincule con el uso comercial de la marca a la par de adquirir aquellos instrumentos virtuales vinculantes, se trata de ligar el uso comercial con derechos reconocidos y un correcto manejo de información, para efectivamente contar con un sistema de negocio propio y dotado de la totalidad de elementos para que sea un éxito, en complemento con el esfuerzo del titular para diferenciarse de la competencia, pero con una base sólida que por sí misma genera un valor.