La Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación (Seciti) de la CDMX invertirá 10.9 millones de pesos para apoyar un proyecto de reconversión tecnológica, en alianza con la UNAM y con la delegación Tlalpan, que permitirá transformar aceite comestible desechado y convertirlo el biodiésel para vehículos de transporte de pasajeros y carga.
CARTA DE MÉXICO
El esfuerzo permitirá generar 90 mil litros anuales de biodiésel, que podrán ser utilizados en vehículos del sistema Pumabús y en camiones recolectores de basura de la delegación Tlalpan.
La materia prima para dicha planta provendrá de la recolección del aceite comestible de desecho de los restaurantes de la delegación Tlalpan y de Ciudad Universitaria, que mediante su reciclaje permitirá la obtención del biocombustible.
La responsabilidad técnica del proyecto estará a cargo del Departamento de Sistemas Energéticos, de la División de Ingeniería Eléctrica de la Facultad de Ingeniería de la UNAM. Ellos proporcionarán el sitio de instalación de la planta y garantizarán el mantenimiento para su operación una vez instalada.
La Seciti, además de aportar los fondos económicos, colaborará con la delegación Tlalpan y la UNAM para invitar a los restaurantes de Ciudad Universitaria y de toda la demarcación Tlalpan para que proporcionen el aceite usado de cocina.
ENERGÍA LIMPIA. De acuerdo con artículos reunidos por la Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal (Redalyc), desde principios de los años 80 existen reportes de investigaciones en las que el aceite comestible desechado por las cocinas puede ser transformado en biodiésel y glicerina mediante una reacción química llamada transesterificación.
Aunque hay diferentes rendimientos, dependiendo del aceite que se usa como materia prima y del proceso que se ha usado en cada estudio, se calcula que en promedio se pueden obtener entre 83 litros de biodiésel por cada 100 litros de aceite procesado.
En México, ya existe una compañía del estado de Yucatán, llamada Energía Girón, que colecta aceite comestible desechado por restaurantes y hoteles. De acuerdo con información que fue difundida por el Fondo de Sustentabilidad Energética (FSE), de la Secretaría de Energía, por cada litro de biodiésel producido por Energía Girón se evita la contaminación de mil litros de agua y, al mismo tiempo, se dejan de generar 2.06 kg de Dióxido de Carbono (CO2)
En la Ciudad de México, Bernardino Esteban Rosas Flores, director de Desarrollo Científico y Tecnológico de la Seciti, explicó que una vez concluida la planta que planean realizar en alianza con la UNAM, los vehículos recolectores de basura de la delegación Tlalpan y el transporte interno de Ciudad Universitaria, conocidos como Pumabús, utilizarán el biodiésel que se genere para su consumo. Este proyecto arrancó en noviembre de 2016 y se espera que concluya a finales de 2018.
El funcionario de la Seciti explicó que se pretende recolectar más de 5 mil litros mensuales de aceite comestible de desecho provenientes de 82 restaurantes de la delegación Tlalpan, mientras que otros 10 mil 687 litros anuales se recolectarán de 23 restaurantes ubicados en Ciudad Universitaria.