Por Montserrat Muñoz
Guadalajara, Jalisco. (Agencia Informativa Conacyt).- Empresas que pertenecen al sector médico (humano y veterinario), farmacéutico e incluso alimentario de la región del Bajío y a nivel nacional se han visto impulsadas por el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), a través de los servicios e investigaciones del área de Biotecnología Médica y Farmacéutica (BMF).
Esta es una de las cinco líneas de investigación del Ciatej, establecida desde 2009 en la unidad Guadalajara y que busca atender las demandas del sector salud a través de proyectos que se refieran a la prevención, tratamiento y diagnóstico de enfermedades.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el doctor Mario Alberto Flores Valdez, director de BMF, señaló que estos proyectos se dividen en cuatro principales sublíneas de investigación: Desarrollo y evaluación de vacunas y compuestos inmunomoduladores; Desarrollo y validación de pruebas de diagnóstico molecular; Desarrollo y evaluación de productos con potencial terapéutico e Ingeniería biomédica de medicamentos biotecnológicos e ingeniería de tejidos.
El doctor Inocencio Higuera Ciapara, director general de Ciatej, explicó que estas sublíneas presentan fortalezas de gran interés para el sector productivo, por lo que se ha buscado la consolidación de cada una de ellas.
“Biotecnología Médica y Farmacéutica es una de las líneas de investigación de mayor impacto y de mayor futuro, ya que cada vez hay un grupo más consolidado y las nuevas capacidades en materia analítica y de pruebas en vivo pondrán a la institución en otro nivel”, compartió el directivo.
El grupo de BMF se conforma por 23 investigadores, de los cuales 21 cuentan con un doctorado en ciencias y dos con maestría. Actualmente hay 15 miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), 13 de ellos nivel I y dos candidatos.
En tanto, se atienden a más de 80 estudiantes de pregrado y posgrado en promedio por año. Tan solo en 2016, se graduaron 11 alumnos de maestría, dos de doctorado y cuatro de estancias posdoctorales.
En promedio, el área de BMF realiza 40 proyectos por año, de los cuales aproximadamente la mitad es financiada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través de sus diferentes convocatorias y programas, mientras que el porcentaje restante es a solicitud del sector privado.
En 2016, se obtuvieron alrededor de 30 millones de pesos. Una cantidad importante de este monto fue parte de ministraciones de la convocatoria de Apoyo al fortalecimiento y desarrollo de la infraestructura científica, para la creación de la Unidad de Evaluación Preclínica (UEP) y la consolidación de la investigación en vacunas y la manipulación de células troncales.
El año pasado, el grupo de BMF obtuvo siete solicitudes de patente y un derecho de autor; desde 2013, el área contribuye con cerca de 30 por ciento de las solicitudes de patente del Ciatej. “En publicaciones arbitradas, el aporte es de entre 20 y 30 publicaciones por año, en 2016 fueron 28”, mencionó el doctor Mario Alberto Flores.
Desarrollo y evaluación de vacunas
La elaboración de vacunas ha tenido desde sus inicios un fuerte impacto en la disminución y erradicación de distintas enfermedades. Esta sublínea de trabajo, enfocada en la prevención de patologías, busca aplicar herramientas innovadoras para el diseño, desarrollo y optimización de formulaciones con propiedades inmunoprotectoras para enfermedades de interés humano y veterinario, con un enfoque hacia la utilización de nuevos inmunógenos o mezclas de estos con moduladores y potenciadores de la respuesta inmune.
Uno de los retos más inmediatos para la vacunología se refiere a enfermedades infecciosas emergentes, por lo que uno de los proyectos más representativos de esta sublínea de investigación ha sido el desarrollo de una vacuna producida por ingeniería genética para el síndrome respiratorio y reproductivo porcino (PRRS, por sus siglas en inglés), la cual además se complementa con ciertos virus que potencian la capacidad de protección en modelos animales. Esta investigación corre a cargo del doctor Abel Gutiérrez Ortega.
“También tenemos candidatos a vacunas contra garrapatas, para lo cual se hizo una disección de la garrapata y se identificaron proteínas que pueden ser nuevos blancos para defender al ganado bovino de este parásito. Bajo el liderazgo del doctor Moisés Martínez Velázquez, este desarrollo ya fue evaluado en estudios clínicos en vacas y está muy cercano a licenciarse”, señaló el director de BMF.
Un proyecto más se refiere a la investigación de una vacuna contra la tuberculosis en su estado latente, para lo cual se están iniciando ensayos para ver cómo funcionan vacunas recombinantes en casos de tuberculosis y diabetes.
Desarrollo y validación de pruebas de diagnóstico molecular
Bajo el enfoque del diagnóstico de enfermedades, esta sublínea trabaja en investigaciones que identifiquen y produzcan proteínas o moléculas para usarlas como biomarcadores que, a su vez, permitan la detección de ciertos padecimientos tanto crónico degenerativos como infectocontagiosos.
La utilización de herramientas nanobiotecnológicas y otras técnicas de vanguardia son imperativas para lograr la detección temprana, específica y certera de diversas patologías crónico degenerativas e infecciosas humanas y animales.
Algunos proyectos de esta índole son para la creación de métodos de diagnóstico de cáncer de mama. “Acabamos de meter una propuesta en consorcio con una empresa de Guadalajara y otra de Alemania, para seguir con pruebas diferenciales entre dengue, zika y chikungunya. Este proyecto lo trabajan los doctores Darwin Eduardo Elizondo Quiroga, Abel Gutiérrez Ortega y Tanya Amanda Camacho Villegas”, señaló el doctor Flores Valdez.
Desarrollo y evaluación de productos con potencial terapéutico
En cuanto al tratamiento de enfermedades, el Ciatej desarrolla bajo esta sublínea ensayos para la producción y evaluación preclínica y clínica de fármacos biotecnológicos para determinar su actividad biológica y otros aspectos.
Los objetivos son minimizar los efectos secundarios, disminuir la posibilidad del surgimiento de microorganismos resistentes a antibióticos y reducir la toxicidad al mínimo de las sustancias a probar.
Aunque los proyectos son incipientes, estos se enfocan en evaluar y validar las propiedades biológicas de medicamentos y alimentos funcionales y nutracéuticos. “Por ejemplo, conocer si un alimento suplementado con un extracto de alga, con un azúcar especial de estevia, agave o inulina promueve o no una mejor asimilación de los nutrimientos, una menor captura o permanencia de grasa o un mejor control de glucosa en sangre por el tema de diabetes”, comentó el doctor Flores Valdez.
Medicamentos biotecnológicos e ingeniería de tejidos
A través de la aplicación de conocimientos de ingeniería, biotecnología y otras áreas, se busca la síntesis de biomateriales y el estudio de interacción de células y tejidos, así como la generación y validación de dispositivos médicos y biosensores; la rehabilitación de sistemas fisiológicos y el diseño de micro y nanotecnologías para entregas sitio-dirigidas.
“Esta es una sublínea que nace cobijada en la de Desarrollo y evaluación de productos con potencial terapéutico. La diferencia con esta es que en la primera abarcamos los alimentos funcionales, fármacos tradicionales, plaguicidas, toxicidad y demás. En la de ingeniería, estamos hablando de manipulación de células madre y de cultivos celulares para la producción de biofármacos y la evaluación de los mismos, o materiales para la salud como andamios que cubran fármacos o alimentos para una entrega inteligente. También tenemos, en vinculación con una empresa, el desarrollo de una impresora en tercera dimensión de vanguardia a nivel nacional”, afirmó el director de área.
Los primeros proyectos de esta sublínea se refieren al desarrollo de combinaciones de anticuerpos para el tratamiento y diagnóstico de cáncer de colon, mama y gliomas.
Expectativas e impacto
El investigador aseguró que para el desarrollo del país es necesaria la investigación que centros como el Ciatej realizan, sobre todo en el área de salud que tiene inevitablemente repercusiones en otras áreas como la economía.
“La apuesta a mediano y largo plazo es trabajar mucho en el fortalecimiento de vacunas, porque dependemos al menos en 80 por ciento del extranjero”, apuntó.
En ese sentido, comentó que los temas que se considerarán prioritarios para el área de BMF serán cáncer, tuberculosis, obesidad y diabetes, entre otras patologías crónico degenerativas y enfermedades infecciosas.
Asimismo, añadió que se trabajará en la colaboración entre los investigadores del grupo y del mismo Ciatej, a fin de ofrecer a la industria servicios más completos.
“Nuestra labor de mayor impacto con las empresas ha sido la revisión de las propiedades, calidad, seguridad y eficacia de los desarrollos de las empresas (como servicio tecnológico). Esto lo hemos hecho principalmente en el sector de alimentos con el simulador de tracto digestivo ARIS, a través del cual se ha podido revisar si nuevas golosinas, alimentos o aditivos modifican o no la microflora intestinal, que es un factor muy importante en salud”, continuó el doctor.
En tanto, en el sector farmacéutico tradicional se apoyó la generación de una vacuna contra influenza. “Estamos por arrancar proyectos en donde vamos a apoyar la producción y evaluación de vacunas contra influenza aviar y contra el virus de Newcastle, que es una enfermedad de aves”, concluyó.