Son factibles de utilizarse en la fabricación de uniformes para enfermeras, laboratoristas y médicos, u otros insumos hospitalarios
Las infecciones hospitalarias en México afectan del 2.1 al 15.8 por ciento de los pacientes, según el nivel de atención en que se hallen y pueden ocasionar la muerte de 38 personas por cada 100 mil habitantes.
Uno de los vehículos de contagio es la ropa del personal médico, que puede trasportar microorganismos que comprometen la salud de los pacientes cuando su sistema inmunológico está deprimido.
Para reducir el riesgo de infecciones hospitalarias, investigadores del Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) crearon un hilo y tela no tejida con propiedades antimicrobianas, es decir, capaces de matar bacterias y hongos.
Estos productos innovadores podrían utilizarse en la fabricación de uniformes para enfermeras, laboratoristas y médicos, u otros insumos hospitalarios, como cubre bocas.
La cualidad antimicrobiana del hilo y la tela se debe a que sus fibras contienen nanoparticulas, señaló en entrevista Carlos Alberto Ávila Orta, especialista del Departamento de Materiales Avanzados del CIQA.
Ambos productos pueden elaborarse a partir de nylon, poliéster o polipropileno, plásticos que se funden para dispersar en ellos las nanoparticulas. La mezcla resultante es enfríada y se diluye con otro polímero para después generar el hilo o la tela no tejida, explicó.
Actualmente existe ropa que promete eliminar bacterias y hongos, pero está hecha con telas comunes que son sumergidas en sustancias químicas para conferirles las propiedades antimicrobianas.
El problema con este procedimiento es que, por tratarse de un mecanismo superficial, las prendas pierden efectividad con cada lavada. Esto no ocurre con el método del CIQA, pues las nanoparticulas, responsables de eliminar los patógenos, son parte del hilo y la tela, indicó.
En el laboratorio, las nanoparticulas han probado tener una efectividad de 90 por ciento para eliminar bacterias Pseudomonas aeruginosa o Staphylococcus aureus, de las más comunes en hospitales.
Ahora validarán su comportamiento en un ambiente real, con apoyo del Hospital Universitario de Saltillo y el Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío, en Guanajuato.
En estas instituciones, personal de laboratorio usará uniforme elaborados con el hilo y tela creados en el CIQA. Posteriormente la ropa será recuperada y un grupo de biólogos de la Universidad de Guanajuato determinará si existen microorganismos vivos y en qué cantidad.
De este modo se determinará la concentración ideal de nanoparticulas que se requiere para hacer garantizar el efecto antimicrobial del hilo y la tela, indicó el especialista y miembro nivel II del Sistema Nacional de Investigadores.
El proyecto denominado “Textiles antimicrobiales para el sector salud (ACTin)” es una colaboración entre instituciones y empresas mexicanas e inglesas y recibe financiamiento del Fondo de Cooperación Internacional en Ciencia y Tecnología (FONCICYT), administrado por el CONACYT y Newton Fund (Reino Unido).
Los socios mexicanos son el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA), la Universidad de Guanajuato, e Industrializadora Sharyl, S. de R.L. de C.V, mientras que The Welding Institute Ltd (TWI), North West Textiles Network Ltd (NWT) , Promethean Particles Ltd, Mexar Ltd, y Bespoke Mat Creation Ltd (BMC) son los socios por parte del Reino Unido. (Agencia ID)