FUENTE: Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, ANUIES, www.anuies.mx
El trabajo de Daniel Chávez tiene aplicaciones en el área médica, como la reducción de costos de las resonancias magnéticas
Con una alternativa al cable Rutherford, que se utiliza tradicionalmente en el ámbito científico, Daniel Chávez, alumno del Doctorado en Física en el Campus León de la Universidad de Guanajuato (UG) presentó un proyecto para el desarrollo de cables superconductores, que permite mejoras en el diseño de magnetos superconductores, con el que obtuvo el primer lugar en la Applied Superconductivity Conference (ASC) 2018, la más importante en su área a nivel mundial.
El trabajo de Daniel Chávez fue seleccionado de entre 135 participantes, y debido a la calidad de su paper (artículo científico corto) tuvo la oportunidad de exponer oralmente su investigación, la cual forma parte de su tesis de maestría que versa sobre el desarrollo de cables superconductores, un tema poco estudiado en México.
Al respecto, Daniel Chávez explicó que el tema de su tesis fue hacer una alternativa al cable Rutherford, el cual se denomina cable en conducto, éste potencializa las posibilidades en diseño de magnetos, porque –a diferencia del Rutherford- se puede doblar en cualquier dirección, mantiene la estabilidad térmica del superconductor y no tiene degradación en la corriente, pues con otros diseños se pierde hasta 40 por ciento de la capacidad de conducción.
El estudiante del Doctorado en Física actualmente realiza una estancia en la Universidad Texas A&M, en donde es asesorado por el Dr. Peter McIntyre, un reconocido investigador a nivel internacional en el área de superconductores. Sobre las aplicaciones inmediatas de su proyecto, dijo que será utilizado para construir los magnetos superconductores que serán utilizados en el futuro colisionador electron-ion del Thomas Jefferson National Laboratory. Otra de las muchas aplicaciones es en la parte médica, incluso el Dr. McIntyre está trabajando en un diseño de una resonancia magnética para detectar cáncer de mama en fases tempranas, reveló.
El cable conductor que desarrolla Daniel Chávez abre las posibilidades a tratamientos como la terapia de protones contra el cáncer, que en México casi no existe. Este tipo de magnetos permiten reducir considerablemente el costo de esta tecnología. Para ejemplificar, señaló que en proyecciones hechas en laboratorio este tipo de tecnología cuesta 100 millones de dólares, pero con el uso del cable en conducto se reduce a 20 millones de dólares. Lo mismo sucede con las resonancias magnéticas, cuyos costos podrían reducirse para los pacientes porque reduciría el tiempo de exposición y, por tanto, de uso de los equipos.
Para desarrollar su investigación, Daniel Chávez también cuenta con la asesoría del Dr. Mauro Napsuciale Mendivil, profesor del Departamento de Física y Director de Apoyo a la Investigación y al Posgrado en la UG, quien lo impulsó a realizar una estancia académica en la prestigiosa universidad Texas A&M.
Al ahondar sobre su proyecto, el alumno de la UG dijo que la tecnología que él plantea no es nueva, se conoce desde la década de los 70 pero otros diseños han tenido problemas para que funcione, entre ellos la degradación de la corriente y los ángulos de doblado.
El diseño desarrollado por Daniel Chávez ya ha sido patentado, y entre sus ventajas figura el tamaño de los ángulos de doblado y que se ha alcanzado cero degradación de la corriente durante el proceso de manufactura. Además, el cable en conducto se puede utilizar en superconductores de baja temperatura y de alta temperatura, por lo que ofrece un amplio rango de posibilidades.
“A mí me dieron el proyecto a partir de una idea, desarrollé un proceso de manufactura, un proceso de control de calidad para checar que no estuviera dañando el superconductor en el proceso, una estrategia de embobinado, el proceso de producción a gran escala, y ahora sabemos producir grandes cantidades; la geometría es lo interesante, es muy específica para cada aplicación, es algo que nadie había hecho y se puede utilizar en distintos superconductores”, detalló.
Sobre su estancia en la Universidad Texas A&M, compartió que los retos y el ritmo de trabajo son muy distintos, es muy demandante, “tienes que trabajar mucho y hacer las cosas por ti mismo, eso te va cambiando… Me gusta mucho, lo disfruto, me gusta hacer diseños porque exploro mis ideas”.
Agregó que ha tenido la oportunidad de formarse en distintas instituciones, y eso le ha permitido constatar la calidad académica de la Universidad de Guanajuato, específicamente sobre el Departamento de Física, enfatizó el nivel de los investigadores, quienes además de ser muy buenos profesores, siempre se están renovando y actualizando.