El Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) obtuvo recientemente la primera patente en el marco del Programa Patent Prosecution Highway (PPH, por sus siglas en inglés), establecido entre el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos de América (USPTO, por sus siglas en inglés).
El PPH (Procedimiento Acelerado de Patentes, en español) tiene como propósito agilizar el procedimiento de otorgamiento de patentes, tanto en el IMPI como en la USPTO, con lo que se evita la duplicidad de esfuerzos y se reducen las cargas de trabajo.
La patente referida -cuyos inventores son los doctores Jetzabeth Ramírez Sabag y Marco Antonio Hernández Rojo, así como los maestros Luis Rubén Amado Hidalgo y Saúl Díaz Jiménez (†), del Programa de Investigación de Recuperación de Hidrocarburos del IMP- consiste en un Sistema de medición en línea de trazadores en cabeza de pozos petroleros (On line measurement system of radioactive tracers on oil well head) y tiene como propósito el monitoreo continuo y autónomo de la concentración de hasta tres diferentes trazadores, ya sea líquidos o gaseosos, de forma simultánea con la producción del pozo petrolero en cuestión.
El uso de esta herramienta tiene alto impacto tanto en la parte técnica como en la económica. En lo económico, al ser sustituido el muestreo tradicional, que requiere personal especializado, gestión continua de permisos de acceso a las instalaciones respectivas, transportación de las brigadas de muestreo a la locación, uso de botellas especiales de alta presión y análisis radioquímico de las mismas, entre otros aspectos, se logra reducir considerablemente los costos inherentes a la naturaleza de este tipo de monitoreo convencional.
Adicionalmente, el beneficio técnico de este sistema es aún más atractivo, ya que al ser monitoreado el trazador de forma continua y autónoma evita la incertidumbre atribuible al muestreo tradicional. Esto es, si consideramos que la información del yacimiento en estudio, proveniente de las pruebas de trazadores, es directamente proporcional al número de muestras, y que cada medición del sistema representa una muestra tomada y analizada, es posible afirmar con toda contundencia que podemos contar con un número más que suficiente de datos que reflejan con mayor fidelidad el comportamiento dinámico del yacimiento. Lo anterior adquiere gran relevancia ya que las pruebas de trazadores son utilizadas en la toma de decisiones sobre los proyectos de inyección de fluidos con fines de recuperación de hidrocarburos.
El sistema -que opera en forma autónoma de acuerdo con un programa de monitoreo establecido- utiliza un detector de radiación de yoduro de sodio activado con talio (Nal (TI)), con características que hacen posible la medición de hasta tres diferentes trazadores y tiene la capacidad de operar a condiciones de temperatura de hasta 150oC. Esto le permite estar inmerso en un contenedor con fluido proveniente de la corriente de flujo, logrando con esto incrementar la sensibilidad de las mediciones.
Cabe destacar que esta herramienta, con la que se revoluciona la práctica de las pruebas de trazadores, reduce la incertidumbre en la respuesta de los trazadores al obtener curvas más confiables estadísticamente, sin necesidad de esperar los tiempos que implica el análisis de la muestra en un laboratorio especializado (quizá del extranjero, de acuerdo con el tipo de fluido) que pueda ser interpretada a través de modelos analíticos y simulaciones numéricas.
El sistema desarrollado -que ya fue probado con éxito en el pozo 119 del campo Puerto Ceiba, del Activo Integral Bellota-Jujo, perteneciente a la Región Sur de Pemex Exploración y Producción- impacta también en problemas de caracterización dinámica de yacimientos naturalmente fracturados (pruebas entre pozos) y contribuye como un elemento adicional en las pruebas de trazadores de un solo pozo, especialmente con el propósito de estimar la saturación remanente de aceite, información por demás relevante para Petróleos Mexicanos, ya que ésta es determinante para sustentar técnica y económicamente un proyecto de recuperación secundaria o mejorada.
Instituto Mexicano del Petróleo
Mtra. Ma. Isabel Rueda Smithers
Gerente de Comunicación Social y Relaciones Públicas