Hasta ahora es el único antioxidante que llega al cerebro y previene ante esclerosis múltiple o Alzheimer, entre otros problemas
El ácido punicico, también conocido como Omega 5, se encuentra naturalmente en sólo dos especies: en la planta china Trichosanthes cucumerina y en la granada. Su potencial como antioxidante se ha comprobado científicamente, y ahora un grupo de investigadores en biología molecular de la Universidad Médica Hebrea de Jerusalén comprobó, tras cuatro años de trabajo, que su potencial puede llegar directamente al cerebro y demorar el daño a las neuronas ante problemas como el Alzheimer o la esclerosis múltiple, mediante un tratamiento con nanotecnología.
El equipo científico lo encabeza es la doctora Ruth Gabizón, quien en reciente visita a la Ciudad de México señaló en entrevista que el Omega 5 o ácido punicico es un ácido graso poliinsaturado que químicamente tiene tres enlaces dobles conjugados.
La mayor cualidad del Omega 5 es ser antioxidante, es decir, protege a las células del organismo del ataque de radicales libres, compuestos que aceleran su envejecimiento y muerte, en un proceso que se reconoce como oxidación o estrés oxidativo.
La doctora Gabizón explica que tanto los antioxidantes naturales como los producidos sintéticamente llegan a diversos órganos del cuerpo, entre ellos la piel, y actúan de forma muy eficiente, pero no así en el cerebro, donde se enfrentan a la barrera hematoencefálica que impide su acceso.
Fue por ello que su equipo científico experimentó con nanomoléculas de Omega 5 y lograron llegar a las neuronas, a las que protege de las llamadas enfermedades priónico genéticas, como el Alzheimer. Es importante hacer notar que un nanómetro equivale a la mil millonésima parte de un metro.
“El diminuto tamaño en el que se manipula al Omega 3 permite que el efecto antioxidante llegue a lugares donde normalmente no lo pueden hacer otros, y entre otras cosas fundamentales, atraviese del cerebro. De esta manera, este producto, es el único antioxidante que actúa a nivel cerebral y evita la oxidación de sus células de manera directa.
“La idea es prevenir un daño a nivel celular, pero no todas las moléculas llegan al cerebro, por ejemplo, las lipídicas se dirigen al hígado y ahí realizan sus funciones. Por ello la importancia de administrarse moléculas preventivas de Omega 5 provenientes de la granada, y cuyo trabajo en el cerebro es recubrir a las neuronas que han perdido su capa protectora (mielina) por efecto de la oxidación”, puntualiza la bióloga molecular de origen argentino.
Por efecto de la desmielinización se pueden originar enfermedades neurológicas, como la esclerosis múltiple y/o las neurodegenerativas, como Alzheimer.
Ante ello, la doctora Ruth Gabizón dejó claro que las cápsulas o el jugo de granada no es cura ante dichos problemas, se tratad de productos que complementan tratamientos dirigidos a esas enfermedades, y que por ello se comercializan como suplementos alimenticios.
Si bien se sugiere como preventivo en personas de edad avanzada, también se propone a jóvenes estudiantes o quienes llevan una vida cotidiana en la que la actividad neuronal es constante.
La doctora Ruth Gabizón visitó México para el lanzamiento del complemento alimenticio que contiene nanomoléculas de Omega 5 obtenidas de la granada. (Agencia ID)