AUTOR: Karla Navarro
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Ensenada, Baja California. (Agencia Informativa Conacyt).- La propiedad antimicrobiana de las nanopartículas de plata fue utilizada por especialistas del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE) para mejorar una solución irrigante que se aplica en procedimientos de endodoncia.
Las mejoras a la solución fueron producto de una colaboración entre Ernestina Castro Longoria, investigadora del Departamento de Microbiología Experimental del CICESE, y el odontólogo Juan Manuel Martínez Andrade, quien cursó la maestría en ciencias de la vida en la misma institución educativa como becario del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Los estudios realizados comprobaron que, al dotar de la propiedad antimicrobiana la solución irrigante, no pierde las características que la llevan a cumplir con su objetivo: la remoción del barrillo dentinario.
Tras una serie de pruebas, ahora ambos especialistas se encuentran en proceso de patentar la nueva solución que vendría a aportar a la calidad de los materiales que se usan en procedimientos odontológicos.
Nanotecnología, microbiología y odontología
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, Ernestina Castro explicó que al detectar la problemática de infecciones en los conductos radiculares en tratamientos de endodoncia, observaron que su conocimiento en las áreas de nanotecnología y microbiología podrían dar solución al conjugarse con la experiencia que como odontólogo tiene Juan Manuel Martínez.
“Propusimos una solución irrigante para el tratamiento de estos conductos al momento de estar haciendo la endodoncia, que es un momento muy crítico en donde la pulpa del diente ya está traumatizada o infectada, entonces los odontólogos realizan la remoción de esta parte dañada que está en toda la raíz del diente”, detalló la investigadora.
Agregó que con la endodoncia se busca limpiar y desinfectar completamente el área para poder obturar y que el paciente no pierda el órgano dentario, para lo cual se utilizan soluciones que remuevan la materia orgánica e inorgánica.
“Entonces nosotros, de esas soluciones, la que vimos factible fue la solución de EDTA, que se utiliza para remoción de materia inorgánica y a esa solución le agregamos nanopartículas de plata y nos dio muy buenos resultados”, precisó.
Subrayó que la forma en que utilizaron las nanopartículas de plata fue específica para atender la problemática en que se centraron, ya que no es un método que podría aplicarse de esa misma forma en otro procedimiento médico.
Las pruebas
Como odontólogo, Juan Manuel Martínez considera que actualmente existe la necesidad de que los materiales comercializados para atender la salud de los dientes sean mejorados y se genere mayor información al respecto.
“Me topé con una deficiencia en la endodoncia, ciertos materiales no son tan efectivos como quisiéramos, me di cuenta que uno de los irrigantes más utilizados para quitar algo llamado barrillo dentinario, que es una materia amorfa que se libera del diente durante el trabajo biomecánico, no tiene suficiente propiedad antimicrobiana”, expuso.
Mediante una síntesis in situ de las nanopartículas de plata, lograron que estas no afectaran las propiedades de la solución irrigante, resultado que se obtuvo tras múltiples ensayos de inhibición de microorganismos.
Juan Manuel Martínez refirió que en primera instancia se llevó a cabo el cultivo de las bacterias que más comúnmente prevalecen en los casos de fracaso de tratamientos endodónticos.
“Probamos las nanopartículas con el irrigante y vimos que sí tienen efecto, al igual pasamos los ensayos a trabajar con biopelículas que es el modus vivendi de las bacterias y los hongos, donde toman una resistencia más alta, esas biopelículas las encuentras en la raíz de los dientes y hay que atacarlas, y sí obtuvimos resultados deseables”, narró.
Para estas tareas fueron usados dientes de bovino in vitro, ya que cuentan con características muy similares a los dientes de los seres humanos.
Nanopartículas de plata
La doctora Ernestina Castro precisó que las propiedades antimicrobianas de la plata se conocen desde hace cientos de años y recientemente se ha combinado con los conocimientos en nanotecnología para determinar su efectividad en tamaño nanométrico.
El tamaño de las nanopartículas va de uno a cien nanómetros, lo que hace imposible percibirlas a simple vista o incluso con un microscopio común, ya que se requieren microscopios electrónicos de transmisión o de barrido.
“¿Por qué son tan efectivas como agente antimicrobiano? Porque debido a su tamaño tienen una mayor superficie de contacto con el microorganismo; por lo tanto, entre más pequeñas sean las nanopartículas de plata estas poseen mayor capacidad antimicrobiana”, mencionó.
Añadió que las nanopartículas de plata al entrar en contacto con un microorganismo, en este caso bacterias y hongos, liberan iones de plata que desestabilizan la pared y membrana celulares y, una vez en el interior, degradan otros componentes, de manera que el microbio muere.
Refirió que actualmente parte de sus estudios se orientan hacia la utilización de nanopartículas de plata para combatir enfermedades provocadas por microorganismos patógenos, vinculando la investigación con médicos especialistas adscritos a hospitales y clínicas.
“Hay problemas serios de microorganismos que ya no son tratables con los antibióticos que hay en el mercado por el fenómeno de resistencia que presentan, a partir de ahí ya nos estamos enfocando primeramente en ver cuáles son esos microorganismos en las distintas enfermedades y estamos empezando a involucrar a gente que está en la clínica y nos puede dar una mucho mejor idea y panorama de cuál es la problemática que tienen”, concluyó.
Dra. Ernestina Castro Longoria |