AUTOR: Karla Navarro
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Ensenada, Baja California. (Agencia Informativa Conacyt).-Utilizar el calor del subsuelo para desarrollar aplicaciones como regular el clima de una habitación o un invernadero, es uno de los proyectos de investigación del Centro Mexicano de Innovación en Energía Geotérmica (Cemie-Geo).
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, José Manuel Romo Jones, responsable técnico del Cemie-Geo en el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), explica que los estudios para concretar usos directos de la energía geotérmica cuentan ya con la suficiente maduración para comenzar a comercializarse en México.
Los proyectos para usos directos del calor geotérmico representan solo uno de los cuatro temas estratégicos en los que se divide el trabajo de los científicos de todo el país que actualmente colaboran con el consorcio.
La evaluación de recursos geotérmicos, la exploración y los prototipos para convertir la energía térmica en electricidad son los temas que junto con los usos directos se conjugan con proyectos transversales para la formación de recursos humanos en el área y la oferta de servicios a través de laboratorios con tecnología de punta.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿En qué consisten los usos directos del calor?
José Manuel Romo Jones (JMRJ): En México hay un montón de fuentes termales de baja temperatura que normalmente las usamos para balnearios, spas, ese tipo de lugares.
En otros países se utilizan en muchas aplicaciones, para calentar o enfriar edificios, ya que el calor no alcanza para generar electricidad pero sí alcanza para eso; también hay aplicaciones agroindustriales para mantener un invernadero a la misma temperatura durante todo el año.
AIC: ¿Ya se aplica ese tipo de tecnología en México?
JMRJ: En México no, hay algunos proyectos de los que estamos tratando de hacer prototipos y difundir, hay tecnología que ya está madura, simplemente hay que difundirla.
Por ejemplo, hay lo que llaman las bombas de calor, que es una máquina que en tiempo de frío usa el calor del subsuelo para que cuando salga, de ahí distribuirlo en la habitación y la calienta, y en tiempo de calor se puede invertir el proceso, ese calor lo mete al subsuelo y entonces es de ida y vuelta dependiendo de la estación. Ese tipo de proyectos ya se pueden hacer, se pueden empezar a difundir.
AIC: Actualmente, ¿se conoce qué lugares del país son los más apropiados para producir energía geotérmica?
JMRJ: Nuestros proyectos están divididos en cuatro grandes temas y uno de ellos es (además de los usos directos) la evaluación de los recursos en todo el país, generar mapas de lo que llamamos el flujo del calor, que es una de las cosas que interesa saber a nivel de país, para ver cuáles son las zonas donde hay mayor temperatura emanando de la superficie.
AIC: ¿Cuál sería otro de los temas que están impulsando?
JMRJ: Otro de los temas es proyectos para exploración. La intención es mejorar las técnicas que hay actualmente para explotar los recursos geotérmicos, y normalmente ese punto es una de las barreras más grandes que tenemos en la parte tecnológica porque es caro y es muy incierto.
Para encontrar los recursos geotérmicos hay una serie de cosas que hay que hacer, empezando por herramientas geológicas; necesitamos una fuente de calor, lo que normalmente tiene que ver con un cuerpo de roca fundida o semifundida a muy alta temperatura, normalmente a 10 kilómetros de profundidad.
Eso cuesta y al final la incertidumbre es grande, en la perforación puede que no se encuentren los recursos y lleva mucho tiempo, así que cualquier cosa que podamos hacer ahí en cuanto a mejorar la metodología o disminuir ese riesgo exploratorio, sería una buena aportación.
Hay varios proyectos en ese tema de técnicas de exploración, tanto en geofísica como geoquímica, como en geología.
AIC: Y el cuarto tema, ¿cuál es?
JMRJ: Otro de los rubros de los temas estratégicos, que es la parte más tecnológica, es el desarrollo de prototipos sobre cómo convertir eficientemente la energía térmica en electricidad y ahí hay muchos diferentes tipos de proyectos, algunos tienen que ver con prototipos de plantas para generar electricidad, hay otros que tienen que ver con simulaciones en computadora, cómo se comportan esas máquinas, las turbinas, en aplicaciones ya tecnológicas.
AIC: ¿Qué se está haciendo en materia de formación de estudiantes?
JMRJ: Eso forma parte de lo que llamamos proyectos transversales. Varias de las instituciones tenemos programas de posgrado en geociencias, en ingeniería, en ramas que se usan en geotermia, entonces se trata de promover que esas instituciones, esos posgrados, tengan más materias en temas de geotermia, que podamos usar de manera compartida los recursos humanos.
Lo primero que hicimos con ese proyecto fue equipar las instituciones con un aula que tenga equipo de teleconferencia para luego poder conectarse y gracias a eso recientemente se impartió un curso de geofísica en CICESE al que se tuvo acceso en otros lugares.
AIC: Eventualmente, el Cemie-Geo generará recursos para sostenerse, ¿en cuál área ven mayor oportunidad para obtener ingresos?
JMRJ: La idea es tener un sistema de laboratorios que está constituido por siete laboratorios, básicamente para analizar las rocas, analizar fluidos, los gases, hacer pruebas de presión y de temperatura, una serie de análisis químicos y físicos que se requieren en geotermia y estos siete laboratorios están distribuidos también en las instituciones que tenemos del consorcio.
La idea es que estos laboratorios funcionen de manera coordinada, de modo que si un industrial o la misma Comisión Federal de Electricidad necesitan un análisis especializado, puedan entrar a una página de Internet y ver cuál es la mejor opción para cada tipo de análisis.
Una idea es que estos equipos se certifiquen y ofrecer un servicio que podría ser como en cualquier otro laboratorio del mundo con un certificado que avale que estamos a ese nivel.