AUTOR: Janeth Cacelín
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Ciudad de México. (Agencia Informativa Conacyt).- Gustavo Eduardo Broca Pimienta, Henry David Palma Palma y Eduardo Gerónimo Ovando, estudiantes del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) plantel Paraíso de Tabasco, elaboraron un alimento para aves de corral sin hormonas en el que se reutilizan los desperdicios más comunes en el estado que son la cáscara de ostión y el coco.
De acuerdo con Gustavo Broca, uno de los integrantes del proyecto y estudiante de la carrera profesional técnico bachiller en química industrial, la hipótesis del proyecto surgió en torno a la problemática del desarrollo de menores de entre nueve y 10 años que, a su corta edad, presentan cambios hormonales propios de un adolescente de 16 años.
“Uno de los principales alimentos de nuestro país son las aves de corral, aves alimentadas con cereales elaborados a base de hormonas y que tienen efectos en el consumo humano. Nosotros comenzamos a hacer pruebas con pollos, y los alimentamos con Alinav por cinco meses”, detalla en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
El proyecto denominado Alimento Natural para Aves de Corral (Alinav), asesorado por la profesora Mayra Balhaus, participó en la Expo Nacional Milset Brasil 2016 donde obtuvo su acreditación para concursar en un evento que se celebrará en la capital de Perú, en noviembre de este año.
¿Qué contiene Alinav?
Para elaborar el proyecto, el equipo se dio a la tarea de seleccionar materiales de la región que se dan en su municipio natal, el poblado de Paraíso, ubicado en una zona costera del estado de Tabasco, donde abunda el coco y el ostión.
“En nuestro alimento tenemos dos presentaciones. Una es a base de alpiste, que se da a las aves menores de 30 días, y la otra es a base de frijol como materia prima principal, con la que se alimenta a aves adultas”, explicó Gustavo Broca.
El frijol en la base del alimento funciona como fuente rica en proteínas y carbohidratos. Además provee vitaminas del complejo B como la niacina, riboflavina y tiamina, según detallan los integrantes del proyecto.
“El alimento también contiene una mezcla mineral que se compone de cáscaras de ostión, cáscaras de huevo y coco, que nos sirve como una fuente rica en calcio para que al momento de que las aves crezcan, sus huesos no se deformen”.
Asimismo, al alimento se agrega melaza que se utiliza como un compactante. Por su olor y sabor, las aves podrán reconocer el producto.
Las pruebas con aves y los resultados
Las aves con las que experimentó el equipo fueron alimentadas durante un periodo de cinco meses con Alinav. Cuando el ave se sacrificó, se realizaron comparativos con un ave cuya dieta fue el alimento que tiene hormonas.
“Al momento en que se sacrificaron las aves, se llegó a la conclusión de que su carne y su piel no contenían grasa. La consistencia del pollo tenía un mínimo de grasa y su color era blanco, eso quiere decir que nuestro alimento está funcionando. Tenían un peso de cinco kilos pero no de grasa, era carne 100 por ciento natural, libre de grasas y libre de hormonas que es lo principal”, detalló Eduardo Ovando.
Asimismo, de acuerdo con su explicación, al momento de cocinarlas, la que fue alimentada con Alinav no desprendía grasa y su carne era firme. No obstante, al cocinar la otra ave, desprendía grasa, su piel era amarilla y tenía un olor desagradable.
Tanto Eduardo como Gustavo y Henry planean buscar financiamientos para poder comercializar el producto.
“Estamos pensando crear una microempresa que no nos afecte en el costo. El kilo de alimento está alrededor de los 32 pesos porque es 100 por ciento natural. Si lo manejáramos por toneladas se reduciría el costo y beneficiaría tanto a nosotros como a la población aquí en Tabasco”, detalló Eduardo Ovando.
También planean extender el mercado y crear alimento para otro tipo de aves.