El dispositivo utiliza nanotecnología para recuperar energía al momento de caminar, correr, hacer ejercicio o al ser agitado
A fin de disminuir el impacto ambiental provocado por desperdicio energético y calor generados durante el uso de cargadores de dispositivos móviles, un grupo de emprendedores mexicanos creó una carcasa que carga la batería del celular a partir de energía producida por movimientos cotidianos del usuario. El dispositivo, que tiene seis milímetros de grosor, utiliza nano-materiales obtenidos de residuos orgánicos para su funcionamiento.
El maestro en química de materiales por la Universidad de Saarlandes Alemania, Thomas Antoine Espinoza, explicó que el dispositivo está conformado por un sistema de imanes de neodimio, utilizados por su campo magnético poderoso que genera electricidad al momento de moverse por actividad del usuario. Dicha energía es posteriormente aprovechada por un alambre de cobre de bajo calibre que, en forma de circuito cubre unas bobinas.
Una vez cumplidos los procesos magnético y eléctrico, la energía capturada pasa a unos “súper capacitores”, que tienen forma cilíndrica y están fabricados a partir de aluminio. Cabe señalar que con el objetivo de una mejor captación energética por movimiento del usuario, estos mecanismos contienen nano-materiales en su interior, fabricados a partir de biomasa obtenida de desperdicios de nuez, hueso de aguacate y piña.
“Estos residuos son calcinados dentro de un horno en ausencia de oxígeno a mil grados centígrados y posteriormente sometidos a un proceso de activación con agentes ácidos y bases para producir un tipo de “carbón” que está catalogado como “de alta área superficial”, ya que es muy poroso a escala nanométrica”, profundizó el también nano-tecnólogo egresado de la Universidad de las Américas Puebla.
A decir del mexicano, una vez producida cierta electricidad y capturada en los súper capacitores, la energía pasa a una batería auxiliar de corriente directa para cargar el celular continuamente sin dañarlo: La carcasa está diseñada para que con una caminata promedio de aproximadamente seis mil a ocho mil pasos, se mantenga una carga de por lo menos del 50 por ciento todo el día, ya que el objetivo no es llenar la pila, sino mantener la energía constante para poder realizar las actividades diarias y evitar quemar la batería, acotó.
Finalmente, el proyecto “nanovolt”, que participó en Cleantech Challenge, concurso de empresas verdes e innovadoras de México, es propuesto por la empresa Carbomex, que actualmente trabaja en modelos de carcasa en impresión 3D, aluminio, plástico o madera. (Agencia ID)