Ya está patentada y lista para transferirse a cualquier laboratorio interesado
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cada año ocurren 5.4 millones de mordeduras de serpientes que causan entre 81 y 137 mil muertes y aproximadamente el triple de amputaciones. Bajo esta necesidad, investigadores del Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM, crearon un antiveneno capaz de usarse en mordeduras de serpientes corales, coralillos, mambas y cobras.
Se trata un fármaco que atrapa las neurotoxinas en las serpientes, es decir, el veneno de las serpientes es una mezcla de diversas toxinas, de las cuales sólo algunas son relevantes para que un individuo muera; es por ello que los antivenenos diseñados para las víboras no son siempre eficaces al tratar a alguien mordido, por lo que suelen usarse dosis muy altas para que funcionen.
De esta manera, el doctor Guillermo de la Rosa Hernández diseñó una molécula que atrapa las toxinas de la serpiente. La innovación fue exitosa tras producirla, inocularla en caballos, que la purifican con anticuerpos y luego probarla en ratones.
Después la probaron contra el veneno de la serpiente Micrurus surinamensis, que vive principalmente en Sudamérica y para la cual no hay antídoto. La molécula diseñada en la UNAM resultó ser altamente efectiva.
Asimismo, el equipo de investigación del IBt obtuvo buenos resultados positivos también al probarla contra el veneno de cobras y mambas de África, y en serpientes del Medio Oriente y Asia, especialmente la llamada ‘cobra de la India’, que causa la muerte de 50 mil personas cada año.
De la Rosa Hernández detalló que “este desarrollo puede acercarnos a un antiveneno universal, utilizando solamente una o varias toxinas clave. En términos de costos, podríamos llegar a un producto más barato para los productores y los usuarios”.
Actualmente la innovación puma ya está patentada y lista para ser transferida a algún laboratorio interesado. Además, por esta investigación, el doctor Guillermo de la Rosa fue galardonado con el Premio Rosenkranz en Biotecnología 2018 que otorga la Fundación Mexicana para la Salud y Laboratorios Roche. (Agencia ID)