Por Antimio Cruz
Ingenieros egresados de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) inventaron dos máquinas automatizadas que sirven para lavar y seccionar hasta 4 mil cabezas de cerdo en un día, lo que ayuda para que la empresa procesadora y exportadora de carne de cerdo Kekén, aproveche este producto que es de interés para los consumidores de Corea, Japón y China.
La empresa que desarrolló la nueva maquinaria se llama Soluciones Mecatrónicas (SOMEY) y surgió en 2013 a partir de un programa de apoyo a empresas de base tecnológica creado por el Consejo de Ciencia, Innovación y Tecnología del Estado de Yucatán (Concitey), que en octubre de 2015 fue transformado en la nueva Secretaría de Investigación, Innovación y Educación Superior (SIIES), de Yucatán.
En muchos países asiáticos el cerdo es símbolo de bienestar y más de mil 500 millones de personas en ese continente tienen en la carne de cerdo su principal fuente de proteínas. Aunque China es uno de los principales productores de carne de cerdo de todo el mundo, la demanda de este producto es tanta que la mitad de la carne que consumen debe ser importada y desde el año 2012 México fortaleció su presencia como exportador a Japón, Corea y China.
Uno de los exportadores mexicanos más importantes es la compañía Kekén, que en Yucatán procesa y secciona hasta 4 mil cerdos por día. Kekén es un exportador intensivo de carne de cerdo, especialmente al mercado asiático. Vende muchos tipos de cortes de carne, empacados y congelados, pero también realiza cortes especiales solicitados por el consumidor.
Uno de los productos que ha generado interés entre los clientes asiáticos de Kekén es la cabeza de cerdo, que es útil para elaborar numerosos platillos. Antes de tener contacto con la compañía Soluciones Mecatrónicas, realizaba el lavado y seccionamiento de las cabezas de cerdo, lo cual se pudo hacer de manera más eficiente con el apoyo de la automatización.
“En el caso de Kekén, ellos tienen una línea de proceso en la cual van pasando colgados los cerdos ya sacrificados. Cuando realizamos una visita vimos que tenían a una persona trabajando la cabeza del cerdo: la lava, le echa agua y lo debe hacer de una manera muy rápida y repetitiva. Hasta ese momento no conocíamos una máquina que sirviera exclusivamente para lavar las cabezas de los cerdos. Entonces, en base a eso, platicamos y acordamos crear una máquina que además fuera funcional para sus instalaciones, teniendo en cuenta sus medidas, tiempo máximo de lavado y temperatura a la que se trabajaría. En base a eso, nosotros diseñamos la primera máquina para lavar las cabezas de los cerdos”, indica el ingeniero Carlos del Castillo Ayora, co fundador de la empresa junto con Ángel Rosado Dzib y Oscar Dorantes.
Con la solución automatizada, el trabajador enfoca su atención y trabajo en cortar y descolgar la cabeza del cerdo; depositarla dentro de la máquina y posteriormente la máquina hace un ciclo de lavado por dentro y por fuera de la cabeza en decenas de segundos, pero menos de un minuto.