FUENTE: Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, ANUIES, www.anuies.mx
* Es fácil de usar, económico y no representa riesgo para los usuarios
* La industria cosmética mexicana se ha consolidado en los últimos años como un factor importante de desarrollo
Un prototipo de molde labial en material de cerámica –que evita la pérdida total o parcial del producto durante el proceso del vaciado generado por el acero inoxidable, elimina el riesgo de seguridad para el trabajador y reduce costos– fue creado por María de Lourdes Mondragón Cedillo, diseñadora industrial por la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El proyecto Diseño de moldes para labiales con materiales alternativos fue desarrollado en el Laboratorio de DermoFarmacia y Cosmetología de la citada sede universitaria y presentando en el 2° Seminario Internacional de Tecnología Cosmética en el Auditorio Francisco Xavier Mina.
El dispositivo compacto –elaborado en cerámica Ceramlab, como denomina su base– presenta cualidades distintas al acero por ser maleable y ofrece garantía, estándares de calidad y especificaciones sanitarias requeridas.
Además ofrece la ventaja de evitar problemas en el desmolde como ocurre con los de acero inoxidable que son desmontados por un operador y de eliminar el riesgo de seguridad para el trabajador y la pérdida total o parcial del producto, ya que no requiere ser recalentada.
Ceramlab resulta ideal para el trabajo en laboratorios, donde la producción requerida es limitada y el costo mucho más económico, pues el material con que está elaborado permite hacer diversas formas, no es oxidable al contacto con el agua y puede esmaltarse permitiendo un desmonte sin la necesidad de recalentamiento, además de que resiste muy altas temperaturas y es fácil de limpiar.
El prototipo es una matriz de cuatro cavidades donde se depositan los envases de tamaño estándar; consta de tres elementos: las caras del molde y una base con sus ejes de fijación, en la parte superior está el vertedero, sitio donde la base labial se deposita en un porcentaje de 30 por ciento a temperatura de 75°, lo que facilita el desmonte, pues no se pega ni se deshace.
“El modelo es compacto y pequeño, ideal para los objetivos de uso en laboratorio”, pues es fácil de usar, barato y no representa riesgo para los usuarios, dijo la ponente.
El diseño ofrece como ventaja adicional el ahorro en el tiempo del proceso del desmolde porque el vaciado es directo a los envases y no en una bala como sucede con el empleado en los métodos industriales masivos.
Previo a elegir la cerámica como material alternativo al acero inoxidable experimentó con diversos materiales, entre ellos el silicón, que si bien es eficiente presentó desventajas al momento del vaciado y el aluminio que provoca que el producto se pegue.
Mondragón Cedillo expuso que la industria cosmética se ha consolidado en los últimos años en México como un factor importante de desarrollo y de estabilidad de la economía nacional, ya que en 2009, según la Secretaría de Economía, generó 24 mil empleos directos, que representaron 10.7 por ciento de la industria química, actualmente México ocupa el tercer lugar en la producción de cosméticos, después Brasil y Estados Unidos.
La diseñadora gráfica descartó que el lápiz labial sea sólo un producto colorativo, pues además de ser un artículo para embellecer, aporta beneficios a la salud que mejoran la calidad de vida y ofrecen una mejor lubricación de los labios. “Los cosméticos constituyen una amplia gama de productos que no se limitan sólo a cremas, perfumes y fragancias, pues también incluye artículos de belleza para la higiene personal, el cuidado y la limpieza del cabello y la piel, entre otros”, concluyó.