AUTOR: Lizbeth Barojas
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Veracruz, Veracruz. (Agencia informativa Conacyt).- Estudiantes de secundaria de Green Oaks School, ubicada en el municipio de Medellín de Bravo, Veracruz, lanzarán en cohetes de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) experimentos al espacio, con el fin de desarrollar su capacidad de creatividad e investigación científica.
Patricia Davis de Pineda, profesora de biología y física en dicho colegio, concedió una entrevista a la Agencia Informativa Conacyt, para detallar cómo inició este proyecto y cómo sus alumnos de segundo de secundaria se convertirán en los únicos mexicanos y latinoamericanos en enviar sus experimentos basados en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
La microbióloga explicó que este ambicioso proyecto nació a partir de un programa llamado Cubes in Space, lanzado por la compañía idoodlelearning en colaboración con el centro de investigación Langley de la NASA y el Consorcio Colorado Space Grant, quienes cada año lanzan convocatorias a nivel internacional para estudiantes de entre 11 y 18 años de edad, con el objetivo de fomentar en niños y jóvenes el desarrollo de sus habilidades científicas.
“Constantemente navego por Internet buscando cursos en línea, diplomados, nuevas ideas que aportar en clase con mis alumnos, creo que es importante innovar en el aula, hacer un aprendizaje más dinámico, motivar a los niños a que exploten al máximo su creatividad, no basta con el estudio a través de libros, hay que llevar ese conocimiento a la práctica. Precisamente, explorando en Internet, fue que hallé la convocatoria del concurso y me dije: ‘¿Por qué no intentarlo con mis alumnos? Sería una buena experiencia tanto para mí, como para ellos’”.
La idea principal de este concurso es inventar o llevar a cabo un experimento que pueda ser colocado en un cubo de 2.5 centímetros de volumen. Bajo este esquema, y a través de las actividades y contenidos que exigían los lineamientos del concurso, los jóvenes estudiantes con asesoría de su profesora, diseñaron y desarrollaron los experimentos que pudieran ser llevados al espacio, compitiendo con 22 países, siendo solo 10 los ganadores, cuyos prototipos viajan al espacio en dos modalidades, en un cohete sonda o en globo científico de gran altitud de la NASA.
“Fue todo un proceso de aprendizaje, tanto para los alumnos, como para mí como maestra. Una vez entendido el concepto de lo que realmente constaba el concurso, la siguiente etapa consistió en estudiar a fondo los cohetes, su capacidad, su alcance, su función. Usamos muchas matemáticas en el salón y dinámicas de razonamiento. No se trataba de decir ‘voy a mandar algo al espacio’, consiste en pensar qué vas a mandar, ya que debe ser algo realmente ingenioso y que pueda ser útil, en este caso para los astronautas”, explicó Patricia Davis de Pineda.
De acuerdo con la profesora, son cinco cubos los que serán enviados al espacio por estos estudiantes mexicanos, cada uno de ellos contiene una carga experimental diferente, la cual fue elegida a partir de estudios de campo que se llevaron a cabo en el laboratorio escolar. Un microprocesador de sistema informático fue una de las propuestas, con la finalidad de comprobar qué tan resistente resulta esta unidad central de procesamiento a factores como las fuerzas G, el calor del cohete, el frío del espacio, ausencia de oxígeno y la radiación ultravioleta y, por último, dado su comportamiento, analizar si la tecnología que usamos en la Tierra es útil en el espacio. Por otro lado, otro grupo depositó en su cubo bacterias Bacillus, con el propósito de examinar si estas logran proliferarse fuera de nuestro planeta, para comparar cómo se manifiesta su desarrollo en el espacio y en la Tierra.
Estos experimentos, diseñados por estudiantes de Australia, Canadá, Sudáfrica, Francia, Alemania, India, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido, Estados Unidos y México, serán lanzados vía cohete sonda el 23 de junio de 2016, desde la costa este de Virginia, Estados Unidos, mientras que los restantes serán enviados en globos científicos de gran altitud, en agosto de este año, desde Nuevo México.