Culiacán, Sinaloa. (Agencia Informativa Conacyt).- Recientemente, dos estudiantes de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) representaron a México en la edición 58 del Foro de Ciencias Juvenil Internacional de Londres (LIYSF, por sus siglas en inglés). Se trata de José Castillo Gaxiola y Humberto Salinas Lizárraga, alumnos de la Facultad de Medicina, quienes presentaron un prototipo que recicla aceite comestible para convertirlo de biocombustible.
El proyecto consiste en una máquina que permite transformar el aceite utilizado en la industria procesadora de alimentos, convirtiéndolo en biodiesel.
Los jóvenes recibieron asesoría por parte de las científicas del Centro de Ciencias de Sinaloa (CCS), Nydia Berrelleza Garibaldi y Nidia López Parra. Obtuvieron la acreditación en la ExpoCiencias estatal, celebrada en Mazatlán, Sinaloa, donde consiguieron el pase a la competencia nacional, en Tampico, y posteriormente a la LIYSF.
El proyecto
Humberto Salinas explicó que el proyecto consiste en una máquina que acelera la producción de mayor calidad de biodiesel en poco tiempo. Utiliza dos recipientes, en uno de ellos vierte el aceite vegetal reciclable.
“Es una mezcla de metóxido de sodio (CH₃ONa ), que funciona como catalizador. Una vez que tenemos la sustancia en el ‘recipiente 1’ abrimos las llaves para que se dirija al ‘recipiente 2’, donde hacemos el mezclado”, explicó.
El proceso de mezclado, comentó, dura cerca de una hora.
“Contamos con una resistencia y un taladro, este último para mezclar y la resistencia para elevar la temperatura. Trabajamos con temperaturas de entre 40 y 50 grados para la correcta mezcla. Si superara los 70 grados, la mezcla no sería exacta, se echaría a perder, se quemaría”, advirtió.
Durante el proceso, añadió, obtienen biodiesel y glicerol (C3H8O3). La mezcla permanece en el recipiente cerca de 12 horas.
“Proponemos este proyecto como una manera de reciclar y cuidar el medio ambiente. Al reciclar el aceite, no contaminamos el agua y disminuimos la contaminación atmosférica en un 50 por ciento, el dióxido de carbono”, comentó.
Al crear una máquina de este tipo, agregó José Castillo, también es posible facilitar al usuario la producción de su propio combustible. “El ahorro se encuentra también en la elaboración de nuestro propio combustible”, dijo.
Ahora, los estudiantes de medicina de la UAS proponen nuevas mejoras, entre ellas, la adaptación de paneles solares para reducir el consumo de energía eléctrica en el proceso, así como la automatización del equipo para facilitar el empleo al usuario.
Los jóvenes informaron que ya iniciaron los trámites para obtener la patente del proyecto, y actualmente han recibido ofertas por parte de empresarios para comercializar el producto.
AUTOR: Janneth Aldecoa
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT