AUTOR: Erika Rodríguez
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Zacatecas, Zacatecas. (Agencia Informativa Conacyt).- La Fundación para el Conocimiento y Cultura Digital (Funco) surgió por la inquietud de diversos investigadores de instituciones académicas de México, como la Universidad de Sonora (Unison), Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), Universidad Veracruzana (UV) y miembros adscritos a otras instituciones ligadas a la tecnología, con la finalidad de promover el desarrollo de trabajos de innovación social y tecnológica en el país.
En el marco del Festival Latinoamericano de Instalación de Software Libre (Flisol) en Zacatecas, el doctor Erik Huesca Morales, presidente de Funco, declaró en entrevista que el objetivo de la fundación es conocer e introducir las tecnologías en instituciones educativas para la mejora del conocimiento, sacando el mayor provecho a su uso, más allá de fungir como dispositivo sino como medio de creación.
Huesca Morales destacó que una de las mayores preocupaciones de Funco es el rescate del patrimonio cultural mexicano ante la cultura digital, a través de la investigación y generación del conocimiento en tres campos de acción: la educación, la salud y la comunidad.
Refirió que uno de los retos de Funco es el análisis sobre las guías para la formación futura de los jóvenes, en donde se promueva la interdisciplinariedad, la versatilidad en la formación profesional y el intercambio de información entre expertos, cuyos temas están inmersos en la sociedad del conocimiento.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cuál es el papel de Funco en la sociedad mexicana?
Erik Huesca Morales (EHM): Funco busca ser un espacio de reflexión, fungiendo como intermediario entre los científicos y la industria o la educación (…) Buscamos ser un mediador de nuevo nivel entre lo que viene y lo que está. Tratar de hacer que entre los científicos y la sociedad se entiendan.
México tiene la capacidad de poner la punta de lanza en muchas cosas. Nuestros científicos se destacan (…) Nosotros nos visualizamos a la larga como este intermediario capaz de poder promover nuevas formas de expresión cultural entre los que harán un viejo idioma y los que están queriendo desarrollar algo nuevo. No digo que no exista, es algo que todavía está en formación.
Por eso el software libre no promueve la piratería, incentiva no a robar, sino a compartir. Nos dice: comparte, genera, crea comunidad.
AIC: ¿Cuáles son los proyectos que actualmente desempeña Funco?
EHM: Por ahora la fundación tiene varios proyectos. Unos en educación básica, no para volver a decir cómo usar tabletas, puesto que ya hay una voluntad del gobierno federal de darles esas tabletas a los niños de primaria. Entonces buscamos empoderar no a los niños, sino a los maestros. ¿Por qué a los maestros? Los alumnos van y vienen. El que se queda en el aula es el maestro, es quien educa generaciones. Entonces buscamos apoyar a los maestros, generar comunidades, estructurar el uso de la tecnología.
Otro de nuestros objetivos es, partiendo de que el ser humano tiene dos actividades fundamentales desde que es civilizado: la casa y el sustento, lo que estamos haciendo es trabajar con las universidades públicas en pequeñas redes académicas para que adopten nuevas prácticas y nuevos formatos que les permitan ser más precisos ahora. Esa moda, que ya está en Europa, conocida como delirium information modelling, se encarga de la introducción de la tecnología para el perfeccionamiento de actividades profesionales (…) por ejemplo, al hablar de una obra civil en la sociedad de transparencia, que se ha querido potenciar un gobierno de datos abiertos, al hacer uso de las prácticas tecnológicas se conoce cuánto costó una construcción, y el ciudadano sabría muy bien qué es lo que está pasando cuando invierte en ella.
Entonces, la fundación busca ese tipo de tecnologías para incidir en una actividad primaria o secundaria que tenga a su vez repercusión en el país. Estamos trabajando con universidades públicas y privadas en una red académica, lo mismo estamos empezando un proyecto con productores caprinos y universidades para mejorar la calidad de producción de lácteos de ganado caprino (…) y esto pudiendo usar tecnologías de sensores.
Tenemos algunas relaciones fuertes con el grupo de enseñanza de la ciencia del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (Ccadet) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con el doctor Fernando Flores Camacho y la doctora Leticia Gallegos, quienes nos han estado apoyando en contenidos para los chicos de primaria y secundaria sobre el uso de sensores y otros dispositivos.
También estamos por apoyar un proyecto llamado Hacia el espacio. La idea es el diseño de un satélite de cubo y colaboraremos con la Agencia Espacial Mexicana (AEM) y una empresa de software. También invitaremos algunas universidades.
AIC: ¿Cómo se pueden introducir las tecnologías para apoyar, mejorar y no caer en pensar que por tener tecnología la educación va a funcionar?
EHM: Muchos venimos de la experiencia educativa y nos hemos dado cuenta a lo largo de los años que el estado mexicano ha estado legítimamente preocupado por la educación apoyada en tecnología. Sin embargo, entre la preocupación legítima y el que las cosas funcionen hay una brecha gigantesca.
En este punto, es una preocupación que tenemos en la fundación, buscamos interpretar adecuadamente el “cómo” antes que el “qué” (…) Necesitamos crear expertos, que los estudiantes presenten nuevas propuestas y que sus realidades sean extendidas. Por eso son importantes eventos como el Flisol, porque se realizan propuestas, lluvias de ideas, y los asistentes se motivan y colaboran entre ellos para llevarlas a cabo.
Por otra parte, la tecnología nos ha demostrado que tiene tanta flexibilidad como aplicaciones busquemos. Si a los chicos y a los maestros les decimos que usen sus tabletas para tomar fotos y hacer presentaciones, los estamos condenando a seguir haciendo cosas que ya se habían generado. La intención es motivarlos a que produzcan algo, que programen, que sean creativos.
Por ejemplo, lo que ahora llama la atención es la robótica; pero quizá no hay necesidad de tantos robots, sino que alguien proponga un pantalón utilizando nuevas tecnologías. A veces pensamos que la tecnología es solo para la tecnología.
Dr. Erik Huesca Morales |
La tecnología debe de usarse para mejorar la calidad de nuestras comunidades. Mientras un proyecto educativo con tecnología no mejore la calidad de vida del educando, del educador y de su comunidad, no va a servir. Podemos sacar las más altas calificaciones y seguimos con altos índices de pobreza.
La comunidad de Funco en este periodo me designó como presidente, pero sé que alguien más ocupará este lugar y seguiremos produciendo ideas.
AIC: ¿Cómo califica el potencial de México en materia de tecnología educativa?
EHM: México fue de los primeros en utilizar educación a distancia con tecnología: la telesecundaria es un caso de éxito mundial y se hizo en nuestro país en 1968, por satélite, con televisión. Pero se nos olvidan esas cosas. Entonces, no debemos dejar de reconocer a científicos mexicanos que han aportado mucho, como por ejemplo, Sergio Beltrán, el primer mexicano que trajo una computadora a México en 1958, en la UNAM.
No perdamos esa vinculación académica con las nuevas creaciones de conocimiento y no nos aferremos a tradicionales formaciones profesionales. Alguien con cierto perfil puede desenvolverse y desarrollarse en otro.
Los mexicanos nos creemos esas creencias limitadoras. Pero la verdad es que no hay impedimento, ese es el conocimiento. Y el aprendizaje está en todo momento. Ahora, el conocimiento es individual y no se adquiere fácilmente, porque la información estructurada es colectiva. Cada mexicano es responsable de su aportación al país, pero nuestro papel es promoverlo.