Ciudad de México. 1 de septiembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Los derechos de autor y propiedad intelectual están garantizados en el Repositorio Nacional, indicó el director adjunto de Planeación y Evaluación, del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Víctor Carreón Rodríguez.
El Repositorio Nacional será como una gran vasija que contendrá la información de toda la producción científica mexicana, información que ya se encuentra de manera digital, pero cuyo acceso no es tan sencillo.
“De tal suerte que con dicho Repositorio Nacional, se facilitará solo el acceso, en ningún momento se pondrán en riesgo los derechos de los autores”, mencionó el funcionario.
El Repositorio Nacional
Como parte de la estrategia nacional para democratizar y facilitar el acceso a la información académica, científica, tecnológica y de innovación, en 2014 se estableció en la Ley de Ciencia y Tecnología la creación de un Repositorio Nacional.
Un Repositorio Nacional es una plataforma digital que almacena, mantiene, preserva y disemina la información académica, científica, tecnológica y de innovación, la cual se deriva de las investigaciones, productos educativos y académicos, según lo establecido en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 20 de mayo de 2014.
En ese documento oficial se estableció que el impulso, diseño y financiamiento del Repositorio Nacional estaría a cargo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.
Además, se instruyó que “los investigadores, tecnólogos, académicos y estudiantes de maestría, doctorado y posdoctorado, cuya actividad de investigación sea financiada con recursos públicos o que hayan utilizado infraestructura pública en su realización, por decisión personal podrán depositar o, en su caso, autorizar expresamente el depósito de una copia de la versión final aceptada para publicar en acceso abierto a través del Repositorio Nacional”.
En tanto, de acuerdo con el documento Lineamientos Generales para el Repositorio Nacional y los Repositorios Institucionales emitido por el Conacyt, este repositorio permitirá buscar, leer, descargar textos completos, reproducir, distribuir, importar, exportar, identificar, almacenar, preservar y recuperar la información que se reúna.
Tipos de información en los repositorios
De acuerdo con dicho documento ya citado, los repositorios institucionales, de los cuales se alimentará el nacional, contendrán tres tipos de información: publicaciones científicas, productos del desarrollo tecnológico y la innovación y datos de las investigaciones.
Las publicaciones científicas comprenden todo el universo de publicaciones resultado de la investigación. Dentro de estas se incluyen: artículos, libros, capítulos de libros, tesis de posgrado (maestría y doctorado), documentos presentados en conferencias nacionales e internacionales y otros materiales enfocados en la producción de conocimiento.
En tanto, se entiende como productos del desarrollo tecnológico y la innovación, patentes, desarrollos tecnológicos, innovaciones, transferencias tecnológicas, creación o mejora de prototipos, productos, procesos o servicios, o diagnósticos tecnológicos dirigidos al estado de la tecnología.
Por último, los datos de las investigaciones comprenden toda aquella información recolectada y utilizada para la investigación académica, científica, tecnológica y de innovación, además de ser aquella comúnmente aceptada por la comunidad científica como un elemento necesario para validar los resultados de las investigaciones.
Los derechos de autor
Algunas de las inquietudes por parte de la comunidad académica son precisamente cómo se garantizarán los derechos de autor y propiedad intelectual con el Repositorio Nacional.
Óscar Javier Solorio Pérez, profesor de la Universidad de Colima y especialista en derecho de la propiedad intelectual, resaltó que el open access (que es la política en que se inserta el Repositorio Nacional) no es un esquema de transmisión de derechos distinto al derecho de autor, es una política pública que tiene que ver con facilitar el acceso al conocimiento.
“Facilitar el acceso no implica desde luego desconocer o no cumplir con la ley, pero creo que pueden conciliarse, en atención que cada vez se utilice el repositorio para subir contenidos y sea una herramienta viable para que los colegas puedan subir sus contenidos. Y les signifique la misma ventaja que publicarlo en otro lado, tomando en cuenta que la gran mayoría de los profesores investigadores que están adscritos a universidades públicas y privadas, su principal motivación no es buscar una regalía por el paper, sino un reconocimiento y una divulgación de la obra”, resaltó.
Partiendo de esa premisa, la red de repositorios institucionales que interoperarán con el nacional se volverá una gran alternativa para la divulgación de las obras y el acceso al conocimiento, sin que esto signifique vulnerar los derechos de autor.
Hay que recordar lo que se establece en los Lineamientos Generales para el Repositorio Nacional y los Repositorios Institucionales emitido por el Conacyt: el repositorio nacional tiene como principal función el acopio, preservación, gestión y acceso electrónico de información, ello sin perjuicio de las disposiciones en materia de patentes, protección de la propiedad intelectual o industrial, seguridad nacional y derechos de autor, entre otras, así como de aquella información que, por razón de su naturaleza o decisión del autor, sea confidencial o reservada.
Por ejemplo, un artículo que se publica en una revista indexada, la cual establece un embargo de 15 o 18 meses, en el Repositorio Nacional esta información no aparecerá hasta que haya concluido dicho periodo de embargo, indicó Víctor Carreón.
Licencias Creative Commons, una alternativa
Un aspecto importante a tomar en cuenta son las licencias, que le permitirán al autor ofrecer algunos derechos muy específicos a terceras personas bajo ciertas condiciones.
Al respecto, Jesús Manuel Niebla Zatarain, especialista en inteligencia artificial y derecho de autor, indicó que el modelo Creative Commons es una buena opción para el Repositorio Nacional.
“Creative Commons es un modelo de licenciamiento que se desarrolló teniendo en mente siempre el reconocimiento al autor del material original, garantizando la máxima distribución del material artístico a través de medios digitales desde una perspectiva que permita no solo la protección de estos, sino también proveyendo al potencial usuario certeza relativa que el uso pretendido no irá en contra de lo establecido por esta licencia”, señaló el especialista, quien actualmente realiza un posgrado en la Universidad de Edimburgo, en Escocia.
Destacó que esto beneficia a los autores porque hace que su trabajo se conozca y se pueda utilizar para crear otras obras. Además podría permitir desarrollar redes de colaboración entre investigadores. “Es un modelo que beneficia no solo a autores establecidos, sino también a aquellos quienes son aspirantes, pues no solo permite que su trabajo llegue a gran número de personas, sino también puede otorgar autorización para que la obra se utilice para la creación de obras derivadas, lo cual permite alcanzar un mayor número de usuarios potenciales”.
De tal manera que con el Repositorio Nacional se podrá tener mayor acceso a la información científica, tecnológica y de innovación que se genera en el país, lo cual podría favorecer e impulsar una mayor producción científica.