Los compuestos de la planta aceitilla tienen la capacidad de atravesar la pared celular de las bacterias
La tuberculosis es una de las principales causas de mortalidad a nivel mundial, tan sólo en 2014 se reportaron 1.5 millones de defunciones por esta enfermedad. A fin de combatir este padecimiento, investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) comprobaron que las propiedades del extracto de la planta aceitilla elimina una de las cepas que causa la enfermedad.
La investigación realizada en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) consiste en un estudio in vitro donde se comprobó que algunos compuestos presentes en el extracto vegetal de la planta aceitilla (Bidens odorata) tienen la capacidad de atravesar la pared celular de las bacterias, acción que logran muy pocos compuestos debido a que la cepa es multirresistente a los antibióticos.
Los estudios abren la posibilidad de crear nuevos tratamientos naturales eficaces contra la tuberculosis. Para probar la efectividad de los extractos enriquecidos se realizaron pruebas en bacterias de crecimiento rápido, después se evaluó en Mycobacterium tuberculosis y confirmó su actividad antimicrobiana.
“Estamos analizando un compuesto fenólico, del cual no existen reportes científicos en ninguna especie del género Bidens, por lo que el hallazgo es de suma importancia”, mencionó la bióloga Karla Mariela Hernández Sánchez, quien desarrolla la investigación como parte de su maestría en ciencias químico biológico.
Actualmente, para eliminar los microorganismos dañinos se emplean combinaciones de diferentes antibióticos que generan efectos adversos, principalmente de tipo renal y hepático. “De ahí la importancia de buscar nuevos compuestos naturales que no generen secuelas”, señaló María Elena Vargas Díaz titular de la investigación.
La planta se usa en algunos estados de la República como forraje y contiene flavonas que no se han reportado científicamente en otras especies, posee ácidos grasos, así como un compuesto nuevo (glucosídico), el cual presenta buena actividad antimicrobiana.
Hernández Sánchez señaló que al comparar la actividad antimicrobiana de la planta que crece en Durango, Hidalgo y Tlaxcala, corroboraron que aunque se trata de la misma especie, las condiciones climáticas influyen en el tipo y concentración de metabolitos que contiene. La originaria de Tlaxcala es más activa que las otras contra las cepas Mycobacterium smegmatis y Mycobacterium tuberculosis H37Rv.
El siguiente paso del trabajo será realizar pruebas de toxicidad para determinar si los metabolitos en estado puro son capaces de eliminar o inhibir las bacterias. “A partir de los resultados que se obtengan se abrirán nuevas posibilidades para desarrollar nuevos tratamientos con base en compuestos naturales que eliminen cepas multirresistentes”, señalaron las investigadoras. (Agencia ID)