Por Armando Bonilla
Ciudad de México. (Agencia Informativa Conacyt).- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) realizó el pasado 15 de febrero la entrega del Premio Nacional de Salud 2016, el cual reconoce a todas aquellas personas que aportan soluciones innovadoras a temas de salud en México.
En la categoría de Persona, fue reconocido el doctor Jorge Eugenio Valdez García, decano de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud del Tecnológico de Monterrey (EMCS), a quien se le galardonó por su trayectoria, dentro de la cual destacan proyectos de investigación como el denominado Regeneración celular de córneas artificiales biocompatibles.
¿Quién es el doctor Valdez García?
Entrevistado por la Agencia Informativa Conacyt, Jorge Eugenio Valdez García, quien se confiesa amante de la lectura, incluida la literatura médica, relató cómo fue que decidió estudiar medicina y cómo es que la carrera lo llevó hacia el mundo de la investigación y más adelante a la docencia, hasta convertirse en lo que él considera una persona con tres profesiones simultáneas.
En ese contexto, recordó que fue desde que estudiaba la preparatoria que se inclinó por la carrera de medicina y que lo hizo motivado por dos grandes factores: el primero era su facilidad para las materias en las áreas de ciencias biológicas y de ciencias de la salud y el segundo la influencia de su madre, quien era química fármaco-bióloga.
“Ingresé a estudiar la carrera de medicina precisamente en el Tecnológico de Monterrey y en el trayecto tomé un curso electivo que tuve la oportunidad de realizar en el extranjero. Fue así como aún en la licenciatura entré en contacto con la investigación científica”.
Desde ese momento, recordó, comenzó a interesarse por el área de oftalmología y al momento de presentar el servicio social, se abrió una plaza para realizarlo en un área de investigación en oftalmología en la Ciudad de México.
“Decidí aplicar por esa plaza y, al ser aceptado, me trasladé a la Ciudad de México, donde conocí al doctor Enrique Graue, quien se convirtió en mi mentor durante esa plaza de servicio social. Fue mi primer acercamiento formal en más de un proyecto de investigación y esa actividad me cautivó, así que fui desarrollando mi entrenamiento clínico al mismo tiempo que acudía al Centro de Instrumentos de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México) y trabajaba en los laboratorios realizando investigación”.
Afirmó que tuvo la fortuna de crecer (académica y profesionalmente) en un ambiente al que hoy se denominaría de medicina traslacional, de investigación aplicada a la solución de problemas en el entorno clínico, buscando las soluciones en el laboratorio.
Más adelante, continuó formándose hacia el mundo de la investigación. Realizó estudios de maestría en Boston University, alentado por algunos profesores que conoció en los trabajos de investigación en los que se involucró durante el servicio social. Después regresó a hacer su subespecialidad y obtuvo el grado de maestro en ciencias médicas.
“Tiempo después de regresar fui contratado por el Tecnológico de Monterrey (1996) como profesor de cátedra o asignatura y continué la actividad docente hasta volverme profesor de tiempo completo”.
No obstante, el doctor Valdez García nunca se alejó de la actividad científica ni de la actividad médica; por el contrario, a lo largo de toda su carrera ha combinado las tres actividades y hoy en día se considera una persona con tres profesiones.
“Fui desarrollando a la par de mis otras dos actividades profesionales una tercera profesión como docente, de tal suerte que a lo largo de mi vida profesional me he desempeñado como médico subespecialista en córneas, como investigador y como docente. Conformando con esto una práctica de lo que hoy se conoce como medicina académica”.
Las tres actividades le han permitido generar entornos de investigación, es decir, estos microambientes que favorecen la investigación, y decidió hacerlo así precisamente por los entornos adversos a los que se enfrentó durante su época de estudiante.
“El objetivo es que estos microambientes favorezcan la convivencia de los problemas de salud con los lugares donde está la solución, que son precisamente los laboratorios, los investigadores, los académicos y que a partir de ello se dé este flujo de información para la solución de esos problemas”.
En ese contexto, al doctor Valdez García le ha tocado desarrollar en la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud del Tecnológico de Monterrey, centros de innovación y transferencia en salud, así como la consolidación de su propio grupo de investigación.
En busca de corneas artificiales, la solución a la elevada demanda de trasplantes
Aun cuando el doctor Valdez García sabe que el premio que recibió por parte de Coparmex es un reconocimiento a su trayectoria, considera que existe un trabajo emblemático que pudo contribuir a la toma de esa decisión. Se trata de una investigación a nivel básico sobre mecanismos de reparación celular de la córnea.
“A través de ingeniería de tejidos y terapias celulares, estamos buscando sustituir el trasplante de córnea, ello debido a que las afecciones en la córnea representan una de las tres principales causas de ceguera en el país. Ante ello, buscamos proveer de herramientas para sustituir el trasplante por una córnea artificial que estamos en proceso de desarrollo”.
Dijo también que esa es su línea de investigación más importante porque comenzó a trabajar en ella hace más de 20 años y que lo hizo de la mano del doctor Enrique Graue, actual rector de la UNAM y quien en esos años fuera su principal mentor.
Los hallazgos más relevantes
A través de su investigación, Valdez García y su equipo de trabajo han estudiado el daño del endotelio corneal causado por cataratas y otras condiciones. En un primer momento, dijo, saber qué originaba el daño y por qué era importante para determinar si era necesario o no un trasplante.
Más adelante, como parte de su tesis de maestría, estudió el endotelio y qué tanta habilidad tenía para replicarse. En ese momento encontró una clara relación entre la desaparición de los mecanismos de reparación normales para otras células —mitosis— y la edad.
La conjunción de ese y otros conocimientos que ha ido generando le ha permitido entender cada vez mejor el funcionamiento de las células importantes en los trasplantes de córneas. En una etapa más reciente y tomando como base el trabajo previo, el doctor se dio a la tarea de cultivar y replicar las células del endotelio humano.
Posteriormente, avanzó ese trabajo a la diferenciación de células madre hacia el endotelio, etapa en que trabaja en la actualidad y que en un futuro le permitirá experimentar la introducción de las células en el ojo. “Buscaremos desarrollar un andamio con estas células para que tengan un medio de transporte hacia el ojo”.
Añadió que al juntar ambas cosas, la recreación de células y las membranas —andamios celulares—, se estaría cada vez más cerca del desarrollo de un producto que funcionaría como una córnea artificial.
Más allá del laboratorio
Aun cuando la medicina, la ciencia y la docencia son su mayor motivación profesional debido a que le permiten directa e indirectamente ayudar a muchas personas en la atención a sus problemas médicos reales, sus tres profesiones no son sus únicas pasiones.
“A los médicos y a los científicos nos interesa mucho solucionar los problemas de las personas, lo que las aqueja y en mi caso veía mucha de esa motivación en la oftalmología; al tratar a un paciente, me sentía muy motivado porque lo hacía en un área muy delicada para ellos”.
No obstante, a la oportunidad de trascender que le ha dado la ciencia, el doctor Valdez García considera que su mayor satisfacción está en el balance entre su actividad profesional y la vida personal.
“Hay que generar un entorno donde se vuelva una actividad el círculo alimentador de la otra (…) Ello porque uno debe dedicarse a la propia persona y a las personas que viven con uno, es decir, la pareja, los hijos y la familia en general. Hay que recordar en todo momento que la construcción de la familia es una empresa en conjunto”.
Finalmente, señaló que ello se debe a que el desarrollo profesional exitoso es un reto en conjunto con la familia. “Yo no podría ser mucho en realidad sin el soporte, sin el apoyo de la familia, de mi esposa, y para lograr ese apoyo es importante que existan compatibilidades entre la pareja”.