Por: Manuel Alfonso Arredondo Cisneros
Los artistas, intérpretes y ejecutantes (actores de cine, televisión, teatro, bailarines, cantantes, músicos) han aprovechado los medios electrónicos como la Internet en busca de oportunidades de fama, éxito, negocio o publicidad, con la finalidad de llegar a un mayor número de personas en un mayor número de países sin importar el idioma oficial de éstos; en ese sentido, es habitual observar páginas creadas especialmente para ellos, o grupos que utilizan redes sociales para anunciar presentaciones y distribuir sus propios fonogramas por esa vía, y que además utilizan tanto página web personal como redes sociales para dichos fines, como son los casos de la banda norteamericana BLINK 182, APOLOGY o el grupo argentino LOS CALIGARIS solo por dar algunos ejemplos.
Con lo anterior no quiere decir que la industria disquera tradicional (productores de fonogramas) va a desaparecer sino por el contrario pueden llegar a un mayor número de personas con la venta de sus fonogramas vía internet. El fenómeno que en el presente se trata de explicar es muy parecido a lo que sucede en la industria editorial con los denominados e-books o libros digitales, se trata únicamente de un cambio en la forma de explotación.
Es importante destacar que con la denominada era digital, los grupos musicales, actores e intérpretes han visto una oportunidad masiva de darse a conocer, lo cual con la industria disquera tradicional no les resultaba posible debido a la gran inversión financiera que ésta realiza en los grupos musicales que patrocina.
Este cambio de modelo de negocio lejos de afectar beneficia, pues con el aumento de grupos musicales en la red, se multiplica y fomenta la cultura. Toda vez que la Internet no tiene fronteras y tiene como gracia para los seguidores de estos grupos musicales o ejecutantes el poder estar en contacto directo con sus artistas favoritos el tiempo que lo deseen y escuchar sus canciones o ejecuciones sin la necesidad de traer consigo un disco compacto.
De igual manera, a través de este medio, los seguidores que no se encuentren en el lugar de la presentación, si los artistas lo permiten, pueden observar su espectáculo en vivo (streaming).
En ese tenor, dicho modelo de negocio se ha convertido en un eficaz medio de venta tanto de fonogramas y videogramas de estos artistas, intérpretes o ejecutantes lo cual resulta muy redituable y sirve como publicidad, pues es a través de las páginas de estos que anuncian el lugar y la fecha de sus presentaciones, y muestran sus números de contacto en los cuales pueden ser encontrados para futuras contrataciones.
En la práctica es común observar en la internet tanto a grupos que inician su carrera artística como a grupos ya reconocidos, puesto que se ha convertido en el medio más eficiente y atractivo para llegar a un mayor número de personas a nivel mundial. Por ello, en la actualidad existen agrupaciones musicales que distribuyen su más reciente repertorio primeramente vía internet y posteriormente en forma tradicional (disco compacto), lo cual nos da un reflejo de la importancia que ha tomado el entorno digital para las agrupaciones musicales y artísticas.
Es de vital importancia destacar que si bien la internet sirve de mucho para darse a conocer o realizar contrataciones, también se tiene el riesgo de que sean violados sus derechos conexos reconocidos a nivel internacional, toda vez que se puede dar el caso de que una agrupación apócrifa utilice el mismo nombre haciéndose pasar como la original y utilice sus interpretaciones, actuaciones o ejecuciones en detrimento o en menoscabo de la banda original.
En forma equivalente si se trata de autores-interpretes pueden ser violentados sus derechos autorales tales como el de reproducción (en casos tanto de la obra musical como de la interpretación que se haga de la misma), pero también puede ser tratándose de éstos últimos (autores-intérpretes) que la obra y la interpretación sea modificada o traducida a otro idioma lo cual puede causar un menoscabo no solo a la obra y a la interpretación sino también a la reputación de éstos.
Todo lo mencionado anteriormente puede darse en cualquier momento y en cualquier parte del mundo, esto debido al descontrol que se tiene en la Internet. Por ello, los artistas, intérpretes o ejecutantes deben ponderar si es viable o no darse a conocer en la internet debido a las posibles violaciones que surjan a sus derechos; o en todo caso el no utilizar este medio y seguir en el anonimato o círculo de amigos esperando una oportunidad en la industria tradicional pero sin dejar de mantener el control sobre sus obras e interpretaciones.
Esta decisión es de carácter personal, por lo que se recomienda pedir asesoría sobre los derechos que cada uno de ellos tienen y así poder protegerlos incluso en la internet.
Para cualquier duda o aclaración respecto a este tema o cualquier otra consulta o asesoría relacionada con la Ley Federal del Derecho de Autor y su Reglamento, favor de dirigirte al Departamento de consultas del Instituto Nacional del Derecho de autor a los teléfonos 3601-1097 y 3601-8203, extensiones 28003, 28004, 28007 y 28009 o al correo electrónico: [email protected]
El autor es Licenciado en Derecho, cuenta con diversos cursos y un Diplomado en materiade Propiedad Intelectual. Actualmente se desempeña como Abogado Especialista en Derecho de Autor en la Dirección Jurídica del Instituto Nacional del Derecho de Autor.