Se busca a futuro que el método sea utilizado el tratamiento a otros padecimientos
La sordera es un padecimiento en el que la capacidad auditiva disminuye o desaparece; actualmente existen pocos procedimientos para tratarla, ya que comúnmente es irreversible. Asimismo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta enfermedad afecta globalmente a 360 millones de personas.
Ante ello, Oscar Omar Solís Castro, quien realiza su doctorado en ciencias biomédicas en la Universidad de Sheffield, Inglaterra, emplea células madre obtenidas de pulpa dental para usarlas en la regeneración de neuronas sensoriales del oído que se encuentren dañadas y de esta manera devolver la capacidad auditiva a personas con sordera.
Obtenidas de clínicas, a las piezas dentales se les realiza una abertura para después remover la parte interior denominada pulpa, la cual, una vez extraída se coloca en un plato de cultivo; allí se proliferan por si solas las células obtenidas del diente gracias a la generación de distintas condiciones aptas para su supervivencia, como la regulación de ciertos niveles de humedad, oxígeno, suministro de suero y una solución nutritiva llamada DMM, que contiene azúcares, vitaminas y aminoácidos.
El también maestro en ciencias biomédicas y medicina regenerativa por la misma universidad, detalló que una vez completado este proceso, se identifican marcadores específicos que se encuentran en las células del oído, es decir, se hace un análisis molecular de éstas y se compara con las dentales con el fin de hallar y después estudiar sus características similares.
El biólogo egresado de la UNAM mencionó que las soluciones utilizadas para lograr que las células se estimulen y logren ser sensoriales son protocolos establecidos, en otras palabras, sustancias como el NT3 y BN10, que son factores naturales que promueven la aparición de neuronas durante el desarrollo embrionario.
En este momento se evalúa en el laboratorio de la Universidad de Sheffield cuál componente puede lograr que las células dentales se estimulen lo suficiente para convertirse en neuronas sensoriales. “En la investigación se intenta imitar los pasos innatos en los que se genera una neurona”, acotó Solís Castro.
A decir del experto, el proyecto lleva buen camino y está avanzado. “Al realizar evaluaciones del perfil molecular de las células obtenidas se ha detectado que ya se ha inducido la aparición de genes y proteínas que solo se expresan en neuronas sensoriales, lo cual indica que las células que utilizamos tienen el potencial de serlo”, enfatizó el investigador.
Como parte de la experimentación se planea hacer un análisis para evaluar la electrofisiología de las células obtenidas, la cual consiste en entender su actividad eléctrica.
Por otro lado, el experto en medicina regenerativa agregó que su investigación surgió a partir de un trabajo previo en el que sus asesores de la maestría indujeron la sordera en un animal destruyendo sus neuronas auditivas, posteriormente le inyectaron directo al oído las neuronas auditivas que ellos crearon a partir de células madre embrionarias. Después de un periodo de tiempo se evaluó su capacidad de oído y se descubrió que el animal la retomó.
El mexicano subrayó que la idea es mejorar el protocolo de aquel trabajo para poder hacerlo más eficiente y generar mayor número de neuronas sensoriales que puedan ocuparse en el tratamiento de otros trastornos.
El desarrollo no busca patentarse, ya que se pretende que los resultados estén al alcance de todo ser humano. Actualmente se realiza la investigación en la Universidad de Sheffield Inglaterra. (Agencia ID)