Por Lic. Verónica Rodríguez Arguijo
Al observar con detenimiento nuestro entorno, es indudable que el ser humano convive en todo momento con marcas, ya sean aplicadas a productos o a servicios, por lo que, podría decirse que vivimos inmersos en un mundo marcario.
En este sentido, es claro que las marcas facilitan al consumidor, la elección de productos con cierta rapidez, ya sea por su calidad, prestigio, precio o lealtad a la propia marca, entre otros aspectos, pero no resulta tan frecuente pensar que una forma tridimensional puede protegerse como marca.
Así tenemos que, la propia forma o presentación del producto, el empaque, envoltorio u envase del mismo, pueden constituir una marca, del tipo tridimensional.
En México, existen marcas tridimensionales registradas, protegiendo productos diversos, tales como: las muñecas Bratz (MR. 1126605), la botella para perfume de Bulgari (MR. 466382), los chocolates Kisses de Hersey’s (MR. 689374), la botella de Coca Cola (MR. 578813), el empaque de Bardahl (MR. 473751), los chocolates Turín en forma de conejo (MR. 721706), la botella de agua ‘Ciel’ (MR. 547344), entre otros.[1]
La protección de una forma tridimensional como marca, se obtiene a través de un registro que debe solicitarse y tramitarse ante el Instituto Mexicano dela Propiedad Industrial(IMPI). La obtención de dicho registro confiere al titular, el derecho al uso exclusivo de la marca.
Para la obtención del registro de una marca tridimensional, es necesario que la forma sea suficientemente distintiva, que permita por sí sola diferenciar un producto frente a otro de su misma especie; que no sea de uso común, lo cual invariablemente está sujeto a la discrecionalidad de la Autoridad; que no sea la forma usual y corriente de los productos protegidos o la impuesta su naturaleza o función industrial.
Asimismo, son aplicables otros impedimentos legales, tales como descriptividad o existencia de registros o solicitudes previas. De igual manera, las formas tridimensionales animadas o cambiantes, las que induzcan a error o engañen al público, no son susceptibles de registro.
Por lo anterior, es sumamente aconsejable que, si se desea solicitar el registro de una marca tridimensional o de cualquier otro tipo (nominativa, innominada o mixta), se cuente con la asesoría de expertos en la materia, a efecto de ahorrar tiempo, esfuerzos e inclusive costos, para la obtención de dicho registro.
[1] Las marcas son mencionadas con fines meramente educativos, cuyos expedientes son públicos y pueden ser consultados en el sitio web: http://marcanet.impi.gob.mx