Por Pablo Miranda Ramírez
(Agencia Informativa Conacyt).- Un equipo de investigadores de la Universidad de Guadalajara (UdeG) trabaja en el desarrollo de estrategias para prevenir y revertir el daño celular causado por el síndrome metabólico y evitar así mayores daños al organismo.
La doctora Lizet Yadira Rosales Rivera, investigadora del Instituto de Terapéutica Experimental y Clínica del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) de la UdeG, trabaja en la elaboración de una estrategia que detectaría los daños celulares que produce el síndrome metabólico para así trazar una ruta nutricional que evitaría el avance de padecimientos.
Para la detección de los daños producidos por el síndrome metabólico, la doctora plantea el uso de una técnica denominada “micronúcleos”, una estrategia que consiste en analizar el ácido desoxirribonucleico (ADN) dentro de las células para así evaluar el avance de las enfermedades con base en el daño observado. Rosales Rivera explica que esta técnica se utiliza comúnmente en la detección del cáncer, pero también es útil para otros padecimientos.
“Las células tienen núcleos y dentro tienen el ADN, pero entre más daños tiene esta célula, se encuentran dentro más fragmentos de este material genético, este se ‘rompe’ y empieza a salir del núcleo. Siempre hay un número normal de micronúcleos en las células por cuestiones como el envejecimiento, pero en pacientes con enfermedades estos se incrementan”.
Glucosa, triglicéridos y colesterol
El síndrome metabólico es una serie de padecimientos que se presentan en un individuo y estos incluyen acumulamiento de grasa corporal en el abdomen, junto con un nivel elevado de azúcar en la sangre, aumento en la presión arterial, alta presencia de triglicéridos y limitado flujo de colesterol “bueno”.
Este cuadro de síntomas puede derivar en enfermedades vasculares como la diabetes, detalla la investigadora. Tan solo en 2015, ese padecimiento mató a 98 mil 520 personas en México, representando 15 por ciento de las muertes registradas en el país, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para evitar llegar a esos casos, la estrategia diseñada por la doctora Lizet Rosales Rivera también incluye un plan nutricional rico en antioxidantes para que a través de la alimentación se puedan disminuir, e incluso revertir, los daños a causa del síndrome metabólico.
“Es una técnica muy sencilla y flexible, la idea es que en un futuro se pueda utilizar cotidianamente, es decir, que vayamos con el médico y nos aplique la prueba y nos ayude a detectar posibles daños”, indica la investigadora.
Esta estrategia fue reconocida por el Instituto de Nutrición y Salud Kellogg’s durante la convocatoria que lanzaron este año. El reconocimiento evaluó la viabilidad de realizar este tipo de protocolos, por lo que se brindó financiamiento para llevar a cabo la investigación para iniciar con la aplicación en pacientes con riesgo potencial.
Una prueba sencilla y rápida
La doctora Lizet Rosales Rivera señala que realizar esta prueba es sencillo, pues solo se necesita retirar células de la cavidad bucal del paciente y, posteriormente, aplicar una serie de componentes para que se puedan observar los núcleos del material retirado en un microscopio y así definir el daño nuclear que pueden tener estas células.
“La estrategia que estamos haciendo es con pacientes que presentan una cantidad elevada de micronúcleos, y los mandamos a hacer pruebas exhaustivas para ver si hay riesgo de enfermedad”.
Rosales Rivera explica que este método puede aplicarse para detectar otras enfermedades, además de las relacionadas con los riesgos cardiovasculares; por ejemplo, señala el caso en que una persona acudió por un chequeo médico nutricional, se le aplicó la prueba y, después de análisis más concretos, se supo que padecía insuficiencia renal.
No obstante, desde el Instituto de Terapéutica Experimental y Clínica del CUCS se busca que este protocolo se centre en personas con síndrome metabólico para evitar que ese conjunto de padecimientos derive en enfermedades cardiovasculares.
Para combatir este síndrome, la doctora Lizet Rosales Rivera propone un plan nutricional que incluye alimentos y bebidas como té verde, aceite de oliva, frutos secos y frutos rojos. La investigadora señala que esta dieta cumple con la función de bajar peso, glucosa y lípidos, pero además tendrá la función de disminuir el daño celular.
Este protocolo ya se estará aplicando en estos meses para monitorear los avances y resultados que tenga en la población con riesgo de padecer síndrome metabólico.