Narra el caso de cómo su aislada abuela por el mundo virtual recuperó el lazo familiar
Cansada de la escasa atención que su nieto le presta, una mujer de la tercera edad le apuesta intercambiar celulares. El equipo de la abuela solamente permite enviar y recibir llamadas mientras que el del nieto cuenta con redes sociales. El resultado es una reflexión de cómo el abuso de la comunicación virtual aisla a los seres humanos de tener experiencias vitales como el contacto con otras personas o el acercamiento con la naturaleza. Ésta es la historia que José Pablo Cedeño Treviño, joven de 17 años plasmó en el cortometraje “La apuesta”, con el que obtuvo medalla de oro en el concurso Infomatrix Rumania Final World 2017.
El estudiante de preparatoria en el Instituto Plancarte de Morelia convenció a su propia abuela, la señora Esperanza Estrada y a su hermano Fernando para que actuaran en el video que produjo.
Con este cortometraje, asesorado por su profesor Tomas Hernández Cuellar, el estudiante ganó la medalla de platino en el evento Proyecto Multimedia Michoacán realizado el pasado 24 de febrero en el Instituto Tecnológico de Morelia y organizado por la Sociedad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (Solacyt), lo que le dio el pase directo a Bucarest, Rumania, en Europa del Este.
En el Infomatrix World 2017, que se llevó a cabo del 27 de abril al primero de mayo, participaron 359 proyectos de 45 países, aunque “nueve no se presentaron porque sus naciones se encontraban en guerra”. El estudiante comenta que todos los proyectos tenían calidad y transmitían ideas muy bien planteadas.
Uno de los aspectos más interesantes de participar en este concurso, en donde obtuvo el oro en la categoría cortometraje, consistió en conocer diversas culturas pues cada uno de los participantes se caracterizó de acuerdo a una vestimenta de su región y tuvo la oportunidad de dialogar con algunos sobre la situación que viven y sobre sus costumbres “Me vestí de charro y me pinté la mitad de la cara como catrín para presentar el cortometraje. Me preguntaron el significado de mi atuendo y por qué los mexicanos rendimos culto a la muerte”.
Recién llegado de Rumania y acompañado de sus padres durante la entrevista, el estudiante aseguró que una de las ventajas de su proyecto consistió en que puede ser entendido por personas de distintas culturas pues aborda un problema que actualmente es universal, como es el enajenamiento al que nos lleva el mal uso de la tecnología. “Les expliqué la idea de mi cortometraje a los jurados, sobre el abuso de la tecnología, estaban contentos, me dijeron que se entendía muy bien el mensaje. Creo que si generas una sonrisa entre las personas que ven un cortometraje estarás logrando que les caiga el veinte sobre el mensaje que quieres transmitirles”.
“En todo momento tuve que hablar en inglés, por lo que creo que es muy importante que aprendamos este idioma que nos permitirá salir adelante en retos como éste”, aseguró el estudiante.
José Pablo explicó que uno de sus objetivos es buscar nuevos temas para continuar haciendo cortometrajes en un principio en el que se aborde el uso de la tecnología y posteriormente sobre divulgación de la ciencia. “Me invitaron a una escuela primaria a mostrarles el video y también entre estudiantes de preparatoria y creo que les gustó”.
“La apuesta” puede verse en http://www.youtube.com/watch?