Ciudad de México. (Agencia Informativa Conacyt).- Una definición del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) asegura que la innovación es “la introducción de un nuevo, o significativamente mejorado, producto (bien o servicio), de un proceso, de un método de comercialización o de un nuevo método organizativo, en las prácticas internas de la empresa, la organización del lugar de trabajo o las relaciones exteriores”.
En lo que respecta a la innovación tecnológica, el mismo Conacyt destaca: “innovación que se distingue por una mejora o novedad en las características del desempeño de los productos o servicios, y su aplicabilidad en la práctica dependerá del grado en que dichas características y su grado de novedad sean un factor importante en las ventas de una empresa o industria concerniente (Manual de Oslo)”.
En este marco, el presidente saliente de la Red de Gestión de la Innovación en el Sector Agroalimentario (Red Innovagro), Mauricio Lastra Escudero, subraya que, resultado de su trabajo y colaboración con científicos holandeses, ellos entienden que la innovación es producto del conocimiento de los científicos, pero si no se aterriza en el campo y no genera un beneficio económico, no existe.
Por ello y ante los avances que se vislumbraban en el sector agroalimentario con la firma del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, dos años después de la firma de este acuerdo comercial se conforman los primeros eslabones de lo que daría por resultado la red de innovación tecnológica en el sector agroalimentario más importante a nivel mundial: Red Innovagro.
¿Qué es la Red Innovagro?
Se trata de un espacio de intercambio de experiencias, avances tecnológicos, en donde todos aprenden y en donde México es un referente en materia de investigación e innovación. Su objetivo primordial es promover, difundir y posicionar una cultura de innovación entre los agentes estratégicos del sector agroalimentario, a través de la cooperación e intercambio de servicios y sistemas de información.
Es a través de videoconferencias, talleres, un diplomado sobre gestión de la innovación en línea, su Premio Innovagro, seminarios, becas, entre otros, que se instauran como un mecanismo de comunicación entre instituciones o centros de investigación, sector público, universidades, fundaciones, organismos internacionales, financieros, instituciones privadas y sociedad civil.
Esta Red fue posible, en gran medida, a la conjunción de tres organismos: el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y la Coordinadora Nacional de las Fundaciones Produce (Cofupro).
En tan solo cinco años, la Red Innovagro ha contado con un crecimiento importante, ya que de iniciar con 36 miembros y 12 países, alcanzó 81 miembros de 16 naciones.
Actualmente la Red se encuentra en una etapa de transición, ya que el médico veterinario y zootecnista Mauricio Lastra Escudero había sido su único presidente y su gestión duró cuatro años (plazo máximo para estar al frente), el mes pasado (agosto) fue elegida la contadora Ligia Osorno Magaña, quien admite que encabezar una Red tan consolidada implica grandes retos; no obstante, los principales consisten en enfrentar el cambio climático y la seguridad alimentaria.
Es así como, de acuerdo con lo que ellos mismos estipulan en su página, los objetivos de la Red son: apoyar a los miembros de la Red Innovagro en fortalecer los Sistemas de Innovación Agroalimentaria, a través de acciones que faciliten el diálogo, el intercambio y las alianzas estratégicas; fortalecer las capacidades de los miembros en innovación y gestión de la innovación en el sector agroalimentario.
Asimismo, apoyar a los miembros de la Red en promover e implementar innovaciones y procesos de gestión de innovación en beneficio del sector agroalimentario a través de servicios y sistemas de información; ofrecer diversos mecanismos de cooperación técnica entre instituciones involucradas en innovación y gestión de la innovación, finalmente, difundir experiencias exitosas de innovación y de gestión de innovación del sector agroalimentario.
Para quienes estén interesados en incorporar procesos de innovación en el sector agroalimentario, quizás sea momento de formar parte de esta Red internacional, para poder asistir a las giras que realizan una vez al año para aprender de lo que se hace en otros países o simplemente tomar algún curso o diplomado al respecto.
Finalmente, para formar parte de esta Red hay dos vías: por solicitud o por invitación de algún miembro. Es importante presentar un comunicado formal ante la secretaría ejecutiva en el que se especifique, entre otros, los motivos para ingresar. Cabe destacar que como parte de esta organización se adquieren diversos compromisos como: participar activamente en las actividades de la Red, así como en sus asambleas, ya sea de manera virtual o presencial; colaborar técnica o económicamente; elegir y ser electos para desempeñar un cargo en el comité ejecutivo y presentar las iniciativas.
AUTOR: Judith Ureña
FUENTE: AGENCIA INFORMATIVA CONACYT