Santiago de Querétaro, Querétaro. (Agencia Informativa Conacyt).- Un proyecto escolar exitoso puede ser el detonante para que los universitarios se conviertan en dueños de su propia empresa. Este fue el caso de Carlos Manuel Guerrero Chavarría, egresado de la ingeniería en mecatrónica del Instituto Tecnológico de Querétaro (ITQ) —que pertenece al Tecnológico Nacional de México (Tecnm)— que actualmente es director general de Plaxyz impresoras 3D, dedicada al desarrollo tecnológico, soporte técnico y prototipado rápido en impresión 3D.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, Guerrero Chavarría compartió la experiencia que lo llevó de ser un estudiante diseñador de prototipos a establecer su propia compañía, los retos a los que se enfrentan los desarrolladores de tecnología al momento de emprender y el cómo la innovación que se produce en las aulas puede impulsar la generación de nuevas empresas en México.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cómo surge tu interés por el desarrollo tecnológico?
Carlos Manuel Guerrero Chavarría (CMGC): Surgió en el ITQ, junto con unos amigos iniciamos un club de robótica donde hacíamos los robots y organizábamos competencias de sumo y seguidores de línea. Tuvimos la oportunidad de participar en concursos nacionales en San Luis Potosí, la Ciudad de México, Monterrey y Querétaro. Nos encantaba aprender la parte práctica de todo lo que diseñábamos, ahí vimos la necesidad de tener nuestra propia ingeniería con la que pudiéramos diseñar carcasas, mecanismos y engranes, porque toda esa tecnología es cara, sobre todo para un estudiante.
Mi socio Víctor Lozano —que también es egresado de ingeniería— y yo nos pusimos a investigar el procedimiento para fabricar una máquina de impresión 3D. En el proceso, diseñamos muchos proyectos que fracasaron, así estuvimos durante ocho meses hasta que logramos hacer un prototipo funcional de madera, con piezas recicladas de impresoras viejas y una fuente de un Xbox. A partir de este logro pudimos ver que éramos capaces de hacer este tipo de desarrollo tecnológico e incluso más grande.
AIC: ¿Por qué usar el término “fracaso” en estos procesos de desarrollo tecnológico?
CMGC: Yo utilizo el término “fracasar” porque no lográbamos el objetivo; en el proceso, se nos quemaron fuentes de energía, dispositivos electrónicos y otros problemas; pero creo que la frustración por no lograr lo que queríamos nos fue formando hasta que hicimos algo que era funcional y del que entendimos el proceso.
AIC: ¿En qué momento consideran establecer su proyecto empresarial?
CMGC: Diseñamos un prototipo de impresora 3D y lo metimos a concursar en la Expo Ingenierías del 2014, que es un evento organizado por el ITQ para dar a conocer proyectos tecnológicos que desarrollan instituciones de muchas partes del país; ahí obtuvimos el primer lugar.
A partir de ese proyecto escolar, el equipo de trabajo decidió establecer una empresa, principalmente por la insistencia de varias personas que nos solicitaban si les podíamos hacer este prototipo para sus empresas e información respecto al costo.
AIC: ¿Cómo fue el proceso para consolidar la empresa?
CMGC: Poco a poco le fuimos dando forma a la empresa; tomamos varios cursos y ganamos un Startup Weekend donde pudimos aprender muchas cosas; nos integramos a la comunidad emprendedora hasta generar un modelo de negocios. La empresa se incubó con el apoyo del gobierno municipal a través de la Universidad Anáhuac y terminamos como una de las cinco mejores compañías.
Después nos presentamos ante inversionistas y actualmente tenemos un local en la ciudad de Querétaro, estamos en un makerspace de herramientas integrales, donde se ofrecen servicios de corte láser y nosotros la impresión 3D.
AIC: ¿Cuáles son los factores de innovación que ofrecen a sus clientes?
CMGC: El punto de partida fue nuestro propio modelo de impresora 3D que está fabricada con piezas hechas en México, incluido el filamento o plástico que se requiere. El servicio se ofrece a estudiantes, ingenieros y empresarios; hacemos impresoras, maquetas, prototipos de mecanismos y robótica, además, si el cliente no tiene conocimientos de modelado, nosotros lo asesoramos también.
El diseño de la impresora es abierto, se puede descargar libremente; lo que hicimos fue una versión mexicana donde innovamos la tecnología para hacer más eficiente el tiempo de ensamblado, el precio y que fuera más accesible para los clientes, en especial los estudiantes, talleres, pequeñas y medianas empresas que apenas comienzan en la impresión 3D y que buscan desarrollar prototipos pero que no cuentan con grandes recursos. Desde el 2014 combinamos el estudio con el proyecto empresarial.
AIC: ¿Tienen registros de marca y patentes?
CMGC: El registro de la marca ya está, tenemos algunos materiales y diseños de los cuales se harán los registros de patente pero no de todo, porque queremos aportar más conocimiento a la comunidad tecnológica, que crezca tanto en el ITQ como en Querétaro y México, porque la impresión 3D es tecnología de tendencia.
AIC: ¿Dónde identificas esa tendencia en la tecnología de impresión 3D?
Apoyo Conacyt
El Fondo de Innovación Tecnológica (FIT) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) fomenta y apoya iniciativas de innovación de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) de base tecnológica, así como de startups y personas físicas con actividad empresarial que realicen proyectos de innovación tecnológica significativos y con alto potencial de ser colocados en el mercado como innovaciones tecnológicas. |
CMGC: Se trata de una industria en crecimiento, las marcas se están dando cuenta cada vez más de su importancia. Por ejemplo, una empresa alemana de calzado deportivo muy conocida a nivel mundial ya ofrece un modelo de tenis cuyas suelas son elaboradas en impresión 3D; The Boeing Company y otras empresas aeronáuticas ya elaboran piezas de las turbinas para los aviones porque esta tecnología permite aligerar sus costos sin poner en entredicho la calidad de los productos.
México no se puede quedar atrás en este desarrollo tecnológico y hay que impulsarlo principalmente en los jóvenes, que pueden aportar ideas más frescas, nuevas formas para utilizar la personalización y manufactura original.
AIC: ¿A qué dificultades se enfrentaron para establecer su empresa?
CMGC: Como ingeniero puedo decir que una de las principales dificultades que se tienen para que los proyectos que se desarrollan en el aula se conviertan en opciones de negocio o emprendimiento es la parte de la administración, un área que suele costarnos mucho trabajo.
Los jóvenes que desean iniciar un negocio en tecnología e innovación deben integrarse a las comunidades y eventos de emprendimiento, hay en todo México y son muy atentas en el servicio que ofrecen; te orientan respecto a formar alianzas con otras empresas. A final de cuentas, en lo que se refiere a la parte técnica, ya se cuenta con el talento necesario.
AIC: ¿Qué le recomendarías a los jóvenes universitarios que desean emprender desarrollando tecnología?
CMGC: A los jóvenes que en estos momentos están desarrollando proyectos en las escuelas yo les recomendaría que aprendan a manejar la frustración, es algo normal en el proceso de desarrollar tecnología y establecer empresas. En el emprender con un proyecto de tecnología existe una fluctuación entre fracasar y ganar, es lo que te va manteniendo en el ruedo.
Nosotros sabemos las inquietudes de los estudiantes en ese sentido y la pasión que tienen por desarrollar este tipo de proyectos, por eso queremos dar esa accesibilidad a la tecnología en nuestra empresa.
AIC: ¿Qué proyectos a futuro hay para su empresa?
CMGC: Estamos explorando nuevas tecnologías en impresión 3D; buscamos incursionar ahora en los escáneres 3D, diseños ergonómicos más innovadores en productos de alta calidad y de costo accesible. Actualmente trabajamos en una impresora nueva y en un centro de diseño, donde el cliente pueda hacer sus propios prototipos sin mayores dificultades.