Por Agencia ID
Un grupo de científicos de la Universidad de Washington, en EEUU, ha desarrollado un sistema de ‘Wi-Fi pasivo’, un tipo de conexión que logra “conexiones inalámbricas que usan diez mil veces menos energía que la mejor tecnología que existe hoy”. De esta manera, logran incrementar enormemente la autonomía de los denominados ‘smartphone’ o móviles inteligentes, algo que hasta ahora se ha señalado como el principal punto débil de estos terminales.
Hoy en día, el uso de los smartphones se ha hecho algo cotidiano e incluso imprescindible en nuestra rutina y nuestros hábitos. Su enorme demanda y su rápida evolución ha propiciado que los móviles inteligentes sean lo más parecido a poder llevar un pequeño ordenador en el bolsillo.
Así, su infinidad de posibilidades los ha situado como un elemento indispensable que, sin embargo, posee un punto débil significativo, fácilmente comprobable y que todo usuario de estos dispositivos coincide en señalar: la batería.
El hecho de poder llevar a cabo numerosos procesos y poner en marcha multitud de aplicaciones en resoluciones cada vez mayores provoca que se vea afectada directamente su autonomía, siendo en muchos casos demasiado escasa, algo que provoca que el terminal deba vivir conectado casi cada noche a su correspondiente cargador.
Por este motivo, un grupo de científicos de la Universidad de Washington ha desarrollado un sistema de ‘Wi-Fi pasivo’, un tipo de conexión que logra utilizar 10.000 veces menos energía que la que se emplea actualmente con el método convencional y que busca prescindir de la necesidad de usar la batería.
Tal y como explica Shyam Gallakota, uno de los responsables del proyecto, en declaraciones recogidas por ‘MinutoUno’, “Eso es básicamente lo que el Wi-Fi pasivo logra: conexiones inalámbricas que usan diez mil veces menos energía que la mejor tecnología que existe hoy”.
De esta manera, no solo podríamos ver películas, series o vídeos de larga duración en nuestro dispositivo móvil sin preocuparnos de quedarnos luego “fuera de servicio”, sino que además , al prescindir de la batería, conseguirían que los dispositivos se hiciesen mucho más económicos que en la actualidad.
Así, la novedosa tecnología, incluida dentro de los diez mejores avances tecnológicos de 2016 según el portal especializado ‘MIT Technology Review’, emplea mil veces menos energía que otras conexiones inalámbricas como el famoso Bluetooth, entre otras, y además lo hace a una velocidad alrededor de once veces mayor que esta última.