Fuente: HUGETTE RODRÍGUEZ HERNÁNDEZ, Departamento Jurídico, SELCO®, www.gruposelco.com, [email protected]
Celebrando el XVII aniversario del día mundial de la Propiedad Intelectual (PI), en SELCO® aprovechamos la oportunidad para compartir la experiencia que la empresa ha adquirido a lo largo de dieciocho años de trayectoria, somos orgullosamente pioneros en el área de propiedad intelectual en el estado de Guanajuato y ello nos ha permitido tener la oportunidad de conocer, impulsar y acompañar a empresas e individuos en el emprendimiento y materialización de sus sueños.
Nuestro interés es, motivar a aquellos que aún no se han atrevido a explotar sus ideas, sensibilizarles respecto a que la propiedad intelectual es un área tan dinámica, diversa y rica, que para todos tiene algo que ofrecer.
Debemos comenzar puntualizando que la PI se refiere a aquello que crea la mente, es decir, no solo hacemos referencia a una marca o a una patente, la propiedad intelectual le permite al zapatero proteger sus diseños de calzado, al inventor proteger la maquinaria que desarrolle, al artista proteger su obra, al científico proteger su patente y a todos ellos, defender sus invenciones.
Este campo resulta tan cotidiano y a la vez tan inexplorado, que el lector podrá percatarse de que elije cierto calzado porque es más cómodo o moderno que otro, atendiendo a su marca predilecta, conoce la existencia de medicamentos “de patente” y los “genéricos” e incluso ubica obras originales de diversos autores.
Aún y cuando pudiera parecer cliché, México tiene el potencial suficiente para logar mayor actividad en el área de protección a la propiedad intelectual, no obstante, las encuestas de salida que SELCO® lleva a cabo de manera periódica, han arrojado al día de hoy existe desconocimiento respecto a la PI y sus alcances, en consecuencia, el número de inventores e individuos que realmente usan los mecanismos que se tienen para protección de sus derechos, se encuentra por debajo de lo esperado.
Lo anterior, nos ha llevado a realizar campañas para impulsar a todos aquellos que desean proteger sus ideas e invenciones, a través de dichas campañas, las personas han podido externar que los puntos críticos de preocupación se centran en la inversión económica y el tiempo de los procedimientos.
Ahora bien, respecto a la primera de las preocupaciones, “la inversión económica”, encontramos que la misma debe ser valorada respecto al beneficio que producirá o produce para el creativo o inventor, es necesario que sean respondidas cuestiones como ¿Cuánto he invertido, o pienso invertir en la prestación de mis servicios o en la elaboración de mis productos? ¿Cuál es, o será el alcance de mi negocio? ¿Cuánto obtengo o pretendo obtener con mi negocio? ¿Qué sucedería si alguien más usa lo que yo inventé o creé?
Si de las respuestas a las cuestiones planteadas, concluyo que el beneficio de tener la exclusividad sobre mi marca, obra o invención, vale la pena, entonces la inversión que tenga que realizar será mínima comparada con las satisfacciones que obtendré.
Analizando el segundo punto, “el tiempo de los procedimientos”, subrayaremos que los mismos dependen de dos factores, el legal y el humano, el legal en cuanto a que, por seguridad jurídica existen lineamientos que establecen “tiempos” ya sea de presentación, contestación, notificaciones, etc… y el factor humano, se refiere a que los periodos o fases variarán obedeciendo a la prontitud o retraso que exista en cada actuación que realicen las personas en los procedimientos.
Concluyentemente la PI no es algo que podemos dejar “para después”, sino que resulta ser el corazón de los negocios, la forma en la que te ven, te escuchan y te identifican, con el ánimo de aportar al crecimiento de la cultura de la propiedad intelectual en México, hacemos una extensa invitación a todos aquellos que deseen averiguar más sobre esta interesante área, para que se acerquen con profesionales, vincularse con expertos en el tema les permitirá estar siempre asistidos y utilizar por medio de ellos las herramientas y mecanismos pertinentes para que el valor de sus intangibles aumente.
Conmemoremos el día mundial de la propiedad intelectual con trescientos sesenta y cinco días de enriquecimiento a la cultura de la originalidad.